Un menor de 5 años de edad que se encuentra hospitalizado por una cirugía reciente se llevó la sorpresa al ver en su cuarto a elementos de la Policía Municipal y más grande fue su alegría cuando le entregaron su placa y gorra de la corporación policíaca, con lo que fue nombrado como agente activo.
El pequeño Santiago, que se encuentra en recuperación y del que esperan salga pronto adelante, siempre le ha hecho saber a su madre su admiración y deseo de llegar a formar parte de la Policía Municipal y que lo que más deseaba era una cachucha para que los doctores, enfermeras, familiares y amigos no se den cuenta que de momento no tiene pelo por recibir su tratamiento de quimioterapia.
Su madre con el afán de cumplir con su anhelado sueño hizo llegar la petición especial a la alcaldesa Leticia Herrera, quien de inmediato giró instrucciones para que el pequeño recibiera la gorra, insignia de la corporación y recibiera su nombramiento como agente activo.
Santiago escuchó con alegría a los elementos que le prometieron que en cuanto se recupere, será llevado a las instalaciones de la Policía, donde lo abordarán en patrulla y realizará un recorrido con sus compañeros de la dependencia policíaca.
¿Por qué se cae el cabello en las quimioterapias?
Durante la quimioterapia, se pueden perder cabello y vellos corporales debido a los efectos secundarios de los medicamentos utilizados en el tratamiento. La quimioterapia está diseñada para atacar y destruir células que se dividen rápidamente, como las células cancerosas. Sin embargo, también puede afectar a las células sanas que se dividen rápidamente, como las que se encuentran en los folículos pilosos.
Los folículos pilosos son las estructuras desde las cuales crece el cabello. Cuando la quimioterapia daña estas células, el cabello puede volverse más delgado o caerse por completo. Este efecto secundario es temporal, y el cabello suele comenzar a crecer nuevamente después de que se complete el tratamiento.
Es importante destacar que no todos los tipos de quimioterapia causan pérdida de cabello, y la magnitud de la pérdida puede variar de una persona a otra. Además del cabello en la cabeza, la quimioterapia también puede afectar a las cejas, pestañas y vello corporal.
La pérdida de cabello es uno de los efectos secundarios más visibles y reconocibles de la quimioterapia, pero muchos pacientes encuentran maneras de lidiar con este aspecto de su tratamiento, como el uso de pelucas, pañuelos u otros accesorios para cubrir la cabeza.
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