CIUDAD DE MÉXICO.- Regañar a la pareja por no hacer lo que uno quiere puede convertir tóxica a una relación. Es recomendable establecer límites, pero no se debe generar conflicto a la hora de hacerlo. Recuerda que cuando se intoxica la comunicación, se intoxica la relación; el regaño no debe ser cotidiano y finalmente ten por sentado, que al buen entendedor, pocas palabras.
ZNR