Un autorretrato al fresco que Frida Kahlo tiró a la basura porque no le habría gustado fue vendido en ocho 63 millones de dólares en Nueva York, Estados Unidos.
La obra fue vendida por la casa de subastas Christie's, ubicada en la gran manzana, y el comprador fue un empresario estadounidense que adquirió la obra en más de ocho millones de dólares.
El precio base del autorretrato de la artista fue de siete a 10 millones de dólares que, aunque se pensaba que podría alcanzar los 35 millones de dólares, la puja cesó en apenas un millón y medio más del mínimo establecido.
Se trata de una rara pintura al fresco, es decir, una técnica utilizada para pintar sobre una superficie pintada sobre agua de cal, la cual Frida Kahlo pintó en 1933.
El cuadro cuenta con unas medidas de 27 por 22 centímetros.
Esta pintura, de índole de autorretrato, habría sido tirada a la basura por la propia creadora luego de que no le convenciera el resultado final; sin embargo, una de sus amigas más cercanas, Lucienne Bloch, encontró dicha obra en el contenedor y la recogió a escondidas.
Según Bloch, Frida quedó tan decepcionada con su autorretrato que lo tituló "Autorretrato muy feo", y escribió a lado de su rostro "Very U", que hace referencia al modismo en inglés "muy tú".
Bloch lo vendió años después en una subasta en Sotheby’s, donde fue adquirido por un comprador anónimo, el cual puso la obra a la venta el pasado 17 de noviembre.
La última pintura de Frida subastada fue "Diego y yo", la cual fue comprada por 35 millones de dólares por el empresario Eduardo Constantini y es la más cara de arte latinoamericano hasta la fecha. Se exhibe por estos días en el Malba.
Con información de Clarín.
RG