Thylane Blondeau, se hizo popular en el mundo a inicios del 2000 gracias a una fotografía que le tomaron, siendo catalogada ‘la niña más guapa del mundo’, esto antes de la era de las redes sociales.
Y así fue como inició la carrera de Thylane en el año 2005, con apenas 4 años de edad, participó en el desfile de Jean Paul Gaultier, dejando al público sin palabras por su belleza.
Con esta participación dio inicio a su trayectoria en el mundo de la moda, dándole el título de la ‘niña más guapa del mundo’, que más allá de ser una bendición y a la vez una carga, Blondeau siguió avanzando en su carrera.
Ahora Thylane Blondeau, es una reconocida modelo francesa que a los 10 años ya estaba en el punto de mira internacional, posando para el número de diciembre de Vogue Cadeaux de Vogue París junto a Lea y Prune, otras dos niñas.
Su presencia en la revista, en la que aparecían marcas de lujo como Versace e Yves Saint Laurent, no sólo agotó las existencias de la revista, sino que también creó una gran polémica.
En la fotografía las niñas aparecían vestidas como profesionales adultas lo que suscitó un debate sobre la representación de los niños en la moda. Sin embargo, para los padres de Thylane, el exfutbolista Patrick Blondeau y la actriz y diseñadora de moda Véronika Loubry, lo único que les extrañó fue el collar de 3 millones de euros que lucía su hija en las fotos.
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Cómo ha cambiado ‘la niña más guapa del mundo’
En la actualidad Thylane tiene 22 años y es una modelo muy solicitada y el rostro de grandes marcas.
Se convirtió en embajadora de L'Oréal y modelo del perfume Lolita Lempicka, su carrera es un ejemplo de su capacidad para adaptarse y evolucionar, pues ella inició justo antes de que iniciara la era digital.
Pero su presencia en las redes sociales, especialmente en Instagram con más de 7 millones de seguidores, demuestra su influencia y popularidad. En sus publicaciones comparte aspectos de su vida cotidiana, desde viajes exóticos hasta su pasión por el deporte, heredada de su padre.
Thylane ha cambiado físicamente con el paso de los años, pero lo que más destaca es que ha optando por una melena más corta y morena, una transformación que contrasta con la cabellera larga y rubia de cuando era pequeña. A pesar de este evidente cambio, sigue siendo una chica de rostro angelical.
Sin embargo, la modelo ha incursionado en el mundo empresarial con su propia marca de ropa, Heaven May, que pone de manifiesto su compromiso con la moda y su voluntad de imponer su marca personal en el sector.