Una mujer que vivió en Rusia ha compartido en redes sociales las diferencias culturales que ha experimentado desde que se mudó a México, revelando que hay ciertos hábitos y costumbres que ya no extraña.
A través de un video publicado en TikTok, la joven conocida como Jane explicó cómo ha dejado de lado algunas prácticas comunes en su país de origen, debido a las distintas dinámicas que ha encontrado en su nueva vida en México.
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Los fríos de Rusia, uno de los aspectos que menos extraña: "perdía las ganas de salir"
En su testimonio, Jane menciona tres aspectos específicos de su vida en Rusia que ya no extraña. Uno de los principales puntos que destacó es que no echa de menos el uso de múltiples capas de ropa para enfrentar los duros inviernos rusos.
En contraste con las bajas temperaturas de su país natal, donde los inviernos pueden alcanzar hasta los -27 grados Celsius en ciertas regiones, en México ha encontrado un clima mucho más benigno que le permite salir sin necesidad de abrigarse tanto.
"Viviendo en México, ya no tengo que usar toda esa ropa que necesitaba en Rusia. No más abrigos para frío extremo ni distintos tipos de zapatos para cada temporada", comenta Jane, aludiendo al complicado sistema de vestimenta que requería el clima extremo de su país.
Además, Jane señala que en Rusia, vestirse adecuadamente para salir durante el invierno era una tarea que consumía tiempo y energía, lo que a menudo la desanimaba a hacer planes fuera de casa.
"En invierno, vestirme tomaba tanto tiempo que perdía las ganas de salir", confiesa, añadiendo que este es otro de los aspectos que no echa de menos.
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En México ya no compite con otras mujeres
Otro punto que ha dejado atrás es la necesidad de competir con otras mujeres, una presión que sentía intensamente en Moscú, donde, según ella, la proporción de mujeres es mucho mayor que la de hombres.
Jane describe esta situación como una especie de "competencia" que afectaba su vida diaria.
"Cada vez que regreso, me impacta la cantidad de mujeres. Si fuera hombre, nunca dejaría este paraíso, pero como mujer, prefiero escapar de esa competencia", reflexiona.
Finalmente, Jane aborda un tema relacionado con la manera de comunicarse de sus compatriotas.
Después de siete años viviendo en América Latina ha comenzado a sentirse incómoda con el estilo directo y, a veces, brusco de los rusos.
Aunque admite que en México la gente tiende a ser menos directa, considera que es algo a lo que prefiere adaptarse antes que enfrentar la falta de sensibilidad en la comunicación que observa en Rusia.
"Tras 7 años en América Latina, me empezó a molestar cómo se expresan mis compatriotas. Aunque a veces me quejo de que en México la gente no es muy directa, prefiero mil veces lidiar con eso que enfrentar la frialdad de la gente en Rusia", concluye.
EG