En entrevista con María Celeste Arrarás, Adamari López recordó el momento en el que decidió ir a terapia para afrontar su divorcio con el cantante Luis Fonsi.
"Uno tiene que soltar y dejar ese rencor, ese dolor y más sabiendo que la persona a lo mejor que estuvo involucrada no hizo nada con a lo mejor el mal deseo de hacerme daño, pero al yo guardarlo tanto a lo mejor no me dejaba ver las cosas con claridad", señaló.
Además, agregó: "Hay cosas que pasan que la otra persona tampoco quiere y que no hay que obligar, entonces ya se deja ir y se abren los brazos para todas esas cosas nuevas y maravillosas que uno puede recibir de la vida”.
Respecto a la separación de su ex pareja, mencionó: "En esos momentos, yo lo que quería era ocultarme cosas a mí misma para no dejar que me dolieran. Me agarré mucho de papá Dios, de mi familia, que siempre ha estado a mi lado, y en un momento dado también tuve que visitar un psicólogo porque todas esas cosas que yo quería guardar para no hablármelas a mí misma y para no enfrentarlas me estaban afectando y si no las sacaba y si no me liberaba de eso yo entendía que no iba a poder sobrepasarlo aun cuando yo era una persona que no creía en ir a un psicólogo".
En entrevista con María Celeste Arrarás, Adamari López recordó el momento en el que decidió ir a terapia para afrontar su divorcio con el cantante Luis Fonsi.
"Uno tiene que soltar y dejar ese rencor, ese dolor y más sabiendo que la persona a lo mejor que estuvo involucrada no hizo nada con a lo mejor el mal deseo de hacerme daño, pero al yo guardarlo tanto a lo mejor no me dejaba ver las cosas con claridad", señaló.
Además, agregó: "Hay cosas que pasan que la otra persona tampoco quiere y que no hay que obligar, entonces ya se deja ir y se abren los brazos para todas esas cosas nuevas y maravillosas que uno puede recibir de la vida”.
Respecto a la separación de su ex pareja, mencionó: "En esos momentos, yo lo que quería era ocultarme cosas a mí misma para no dejar que me dolieran. Me agarré mucho de papá Dios, de mi familia, que siempre ha estado a mi lado, y en un momento dado también tuve que visitar un psicólogo porque todas esas cosas que yo quería guardar para no hablármelas a mí misma y para no enfrentarlas me estaban afectando y si no las sacaba y si no me liberaba de eso yo entendía que no iba a poder sobrepasarlo aun cuando yo era una persona que no creía en ir a un psicólogo".