Si en México Coco se convirtió en la película más taquillera, en Estados Unidos el filme de Disney Pixar se convirtió en el cuarto mejor estreno para un fin de semana de Acción de Gracias, sólo por detrás de Frozen (94 mdd), Moana (82 mdd) y Toy Story 3 (80 mdd).
Sin embargo, y a pesar de los comentarios positivos que recibió la película, hubo algo que a los estadunidenses no les gustó. ¿Te suena familiar? Así es, igual que a los mexicanos, a ellos tampoco les gustó el cortometraje Una aventura de Olaf.
Aquí te compartimos el enojo que provocó el corto de Frozen en Twitter:
Anoche vi Coco y todavía estoy enojada por el anuncio de mercadotecnia de Frozen de nueve horas que precede a la película.
Algunos también se preguntaron si habían entrado a la sala correcta:
Vine al cine para ver Coco, ¿por qué estoy viendo una película completa de Frozen?
El "corto" desesperó a muchos por su duración:
No lo odiaba, pero estaba sumamente molesto. Mi mamá y yo nos miramos con una expresión de "¿En serio?" varias veces. A mitad de camino ella incluso preguntó: "¿Cuánto tiempo dura esto?" Sólo queríamos ver Coco.
La trama del corto decepcionó a algunos:
Inesperablemente horrible. Las canciones eran lodo; la trama, idiota. Me hizo detestar la Navidad comercializada —una celebración que disfruté de niño— con una rabia oscura y fundida.