“Mañana, mañana” fue el tema con el que Cristian Castro inició anoche la gira que ha titulado Mi tributo a Juan Gabriel en el Auditorio Telmex que lució nutrido.
Vestido con un traje rosa brillante, el cantante encendió al público desde los primeros minutos que subió al escenario, “Busca un amor” y “Lloran las rosas” fueron los siguientes temas que el público siguió mientras en el fondo una gran pantalla proyectaba un video con flores.
“Así era ella” fue el primero de los temas que más cantó el público, luego vino “Es mejor así” y conforme más se movía al bailar, los cientos de fans gritaban más fuerte.
Durante todo el concierto intercaló temas de su repertorio con canciones de Juan Gabriel, así fue como vino "Adiós, Amor", "Te vas" y "Con tu amor".
Después de “No puedo arrancarte de mí”, Castro dedicó a José José la interpretación que hizo de “Quiero perderme contigo”, para luego dar un giro de 360 grados e interpretar el “Gallito feliz” en versión reggaetón y a ritmo norteño el tema “Para que te vayas”.
Después se permitió preguntarle al público si les había gustado su vestuario, si lo veían más delgado y también les preguntó si iban a celebrar el día de las madres en el transcurso del concierto.
Por momentos fusionó varios temas como “Lo mejor de mí” y “Yo quería”. Antes de abandonar el escenario y regresar con un traje rojo, interpretó “Vuélveme a querer” a ritmo de cumbia, no sin antes decir: “En esta canción quisiera que me acompañará una dama, una dama de buena línea, esta vez quiero una señora, la quiero para la gozadera” y la afortunada no se hizo esperar.
Emocionado el público coreó “Lloviendo estrellas”, en una odisea en la que no hubo tregua para el silencio, casi ligados unos con otros vinieron “Mi vida sin tu a mor”, “Volver a amar” y “Por amarte así”.
En ese lapso del concierto la euforia era tal que tan sólo con anunciar la canción “No podrás”, la gente estallaba en ovaciones y gritos, de manera que cuando vino el tema, los ánimos de los asistentes de unieron en un gran coro que resonó en todo el auditorio.
Al término de este tema, fue notorio como varias personas comenzaron a abandonar la sala. Castro recordó también a Armando Manzanero con varios de sus temas y así escribió uno de los momentos más íntimos de la velada.
Apenas un descanso previo al final en que el ambiente volvió a encenderse con la particular versión de “Azul” una melodía que el público aplaudió con deseos de continuar una noche que había llegado a su fin.