Kim Kardashian bautizó a sus hijos más pequeños en una ceremonia en Armenia, país de origen de sus ancestros.
La ceremonia tuvo lugar en Echmiadzin, a una veintena de kilómetros de la capital, Ereván, donde se encuentra la principal catedral cristiana del país.
Vestida con un ajustado vestido beige, Kim Kardashian llegó al lugar con sus cuatro hijos y su hermana Kourtney. Su esposo, el rapero Kanye West, no estuvo presente.
Después de la ceremonia, la socialité posó durante unos minutos para tomarse selfies con sus admiradores locales.
Se trata de la primera visita de la estrella estadounidense al país asiático desde 2015, cuando viajó allí en ocasión del centenario del genocidio armenio.
Asimismo, continuará con su visita por Armenia y ofrecerá un discurso durante el Congreso Mundial de Tecnologías de la Información.
Los ancestros de la rama paterna de la familia Kardashian emigraron a Estados Unidos desde Armenia, precisamente, huyendo de las persecuciones de 1915-1917, que muchos historiadores y países consideran un genocidio.