MONTERREY.— Una noche llena de éxitos y poder femenino fue la que ofrecio Lupita D'Alessio en el Auditorio Pabellón M, en donde demostró que no necesita tener un sencillo en la radio para poder ser de las consentidas por los regiomontanos.
Fue en punto de las 21:13 horas que la cantante salió ante su público, que la ovacionó de principio a fin en su concierto.
Vestida completamente en color negro, la llamada “Leona Dormida” dio la bienvenida con “Cóncavo y Convexo”.
“Buenas noches, Monterrey”, mencionó, para continuar con su repertorio musical. “Hazme Olvidarlo” fue el segundo tema de la noche y fue entonces que el público comenzó a entregársele cantando con ella.
“Leona Dormida” obtuvo muy buena respuesta, pues es uno de los clásicos de la cantante. Posteriormente vendría la sorpresa de la noche: su invitado especial.
“Estoy bien contenta de estar aquí, con todos ustedes. Quiero hacer un paréntesis muy especial esta noche. Tengo un invitado, pero primero me dejan presentarlo y luego le gritan todo lo que quieran, déjeme saborearlo primero como su mamá. Señoras y señores, con ustedes Ernesto D'Alessio”, dijo, e ingresó al escenario su hijo, quien interpretó “Amor Contigo me da Igual”, así como “Ni Guerra ni Paz”.
La noche continúo y los éxitos de la D'Alessio hicieron que los regios se emocionaran y corearan.
Temas como “Que Ganas de no Verte Nunca Más” marcaron la noche, pues las ovaciones volvieron a hacerse presentes y en esta ocasión más de un fanático se puso de pie para demostrarle su admiración a la interprete de 65 años de edad.
“Inocente Pobre Amiga” se convirtió en una de las canciones más coreadas de la noche, “Ese Hombre” una de las más aplaudidas, al igual que “Acaríciame”.
Con “Mudanzas” llegaría la primera despedida, aunque gracias a la insistencia del público, regresó para interpretar uno de sus más grandes éxitos: “Mentiras”.
Y fue así, tras 17 temas, que Lupita D'Alessio se despidió de los regios agradecida y consentida.