ROMA.- Ennio Morricone, el compositor italiano ganador del Oscar cuyas inolvidables partituras para "spaghetti westerns" tan icónicos como Por un Puñado de Dólares y El Bueno, el Malo y el Feo ayudaron a definir una era cinematográfica, murió el lunes a los 91 años.
Morricone se había roto el fémur hace 10 días y murió "al amanecer" en una clínica de Roma, dijo su abogado Giorgio Assumma.
Afuera de la clínica, Assumma entregó a periodistas un aviso de muerte escrito por el mismo compositor, que comenzaba diciendo "Yo, Ennio Morricone, estoy muerto".
En un conmovedor texto de una página, Morricone agradeció a sus amigos y familiares cercanos por la compañía, nombrando a sus hijos y nietos.
"Espero que entiendan cuánto los amaba", escribió.
Le dedicó "el adiós más doloroso" a su esposa Maria Travia, con quien se casó en 1956, diciéndole que "renuevo el amor extraordinario que nos unió y que lamento abandonar".
Agregó que quería un funeral privado porque "no quiero molestar".
Nacido en Roma en 1928, Morricone fue el responsable de la banda sonora de unas 400 películas, pero su nombre está estrechamente vinculado al del director Sergio Leone, con quien trabajó en los ya clásicos "spaghetti westerns" y también en el drama policiaco Érase una Vez en América.
Morricone trabajó casi todos los géneros cinematográficos, desde el terror hasta la comedia, y algunas de sus melodías son quizá más famosas que las películas para las que fueron compuestas. Destacan también Los Intocables (1987) y Cinema Paradiso (1988).
"Siempre recordaremos, con infinita gratitud, el genio artístico del Maestro Ennio Morricone. Nos hizo soñar, nos conmovió... escribiendo notas memorables que serán inolvidables en la historia de la música y el cine", dijo el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, en Twitter.
El presidente italiano, Sergio Mattarella, dijo que Morricone había "contribuido enormemente a difundir y reforzar el prestigio de Italia en el mundo".
"Con Ennio Morricone se va una parte del cine mundial. Su humildad, combinada con una grandeza de la que nunca presumió, le permitió respaldar películas pequeñas y grandes, dándoles un alma única que las hizo perfectas e inolvidables", destacó el productor de cine italiano Aurelio De Laurentiis.
A Morricone le sobreviven su esposa María, sus tres hijos -Andrea, un compositor y director de orquesta, Giovanni y Marco- y su hija Alessandra.
ROMA.- Ennio Morricone, el compositor italiano ganador del Oscar cuyas inolvidables partituras para "spaghetti westerns" tan icónicos como Por un Puñado de Dólares y El Bueno, el Malo y el Feo ayudaron a definir una era cinematográfica, murió el lunes a los 91 años.
Morricone se había roto el fémur hace 10 días y murió "al amanecer" en una clínica de Roma, dijo su abogado Giorgio Assumma.
Afuera de la clínica, Assumma entregó a periodistas un aviso de muerte escrito por el mismo compositor, que comenzaba diciendo "Yo, Ennio Morricone, estoy muerto".
En un conmovedor texto de una página, Morricone agradeció a sus amigos y familiares cercanos por la compañía, nombrando a sus hijos y nietos.
"Espero que entiendan cuánto los amaba", escribió.
Le dedicó "el adiós más doloroso" a su esposa Maria Travia, con quien se casó en 1956, diciéndole que "renuevo el amor extraordinario que nos unió y que lamento abandonar".
Agregó que quería un funeral privado porque "no quiero molestar".
Nacido en Roma en 1928, Morricone fue el responsable de la banda sonora de unas 400 películas, pero su nombre está estrechamente vinculado al del director Sergio Leone, con quien trabajó en los ya clásicos "spaghetti westerns" y también en el drama policiaco Érase una Vez en América.
Morricone trabajó casi todos los géneros cinematográficos, desde el terror hasta la comedia, y algunas de sus melodías son quizá más famosas que las películas para las que fueron compuestas. Destacan también Los Intocables (1987) y Cinema Paradiso (1988).
"Siempre recordaremos, con infinita gratitud, el genio artístico del Maestro Ennio Morricone. Nos hizo soñar, nos conmovió... escribiendo notas memorables que serán inolvidables en la historia de la música y el cine", dijo el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, en Twitter.
El presidente italiano, Sergio Mattarella, dijo que Morricone había "contribuido enormemente a difundir y reforzar el prestigio de Italia en el mundo".
"Con Ennio Morricone se va una parte del cine mundial. Su humildad, combinada con una grandeza de la que nunca presumió, le permitió respaldar películas pequeñas y grandes, dándoles un alma única que las hizo perfectas e inolvidables", destacó el productor de cine italiano Aurelio De Laurentiis.
A Morricone le sobreviven su esposa María, sus tres hijos -Andrea, un compositor y director de orquesta, Giovanni y Marco- y su hija Alessandra.