Un individuo cruzó corriendo varias hileras de agentes hacia una hoguera enorme durante la representativa ceremonia del festival Burning Man (Hombre en Llamas) y sufrió quemaduras que le causaron la muerte horas después.
La policía investiga el fallecimiento de Aaron Joel Mitchell, de 41 años, quien atravesó dos vallas de seguridad durante el evento, en el que se prendió fuego a una efigie gigante de madera.
Jerry Allen, jefe policial del condado Pershing, en Nevada, dijo que había una multitud de unas 50.000 personas cuando el equipo de bomberos del festival sacó del fuego a Mitchell.
El individuo fue llevado por aire al pabellón para quemados del hospital UC Davis en California, donde falleció el domingo en la mañana.
Los médicos confirmaron que Mitchel estaba alcoholizado, pero está pendiente el informe de toxicología, agregó.
“Todavía no sabemos si fue un acto intencional de su parte o si lo que hizo por estar bajo el influjo de drogas. No tenemos la certeza todavía”, señaló Allen.
Los organizadores del festival dijeron en un comunicado que habían cancelado las hogueras hasta el mediodía del domingo, pero señalaron que proseguirían con la llamada quema del templo prevista para las 8 de la noche.
La quema del templo es otro evento distintivo que marca el fin del festival de nueve días. Más de 70.000 personas han asistido al festival de arte y música que tiene lugar en el desierto Black Rock, a 161 kilómetros (100 millas) al norte de Reno.
Los organizadores, que brindan asesoría de apoyo emocional en el lugar, dijeron en un comunicado: “Ahora es tiempo de cercanía, comunicación y comunidad. El trauma necesita procesamiento. Fomenten las llamadas, los abrazos, los registros y duerman”.
El festival culmina con la quema de una efigie de madera de 12 metros (40 pies) de altura, símbolo del renacimiento, que por lo general tiene lugar el sábado previo al feriado del Día del Trabajo en Estados Unidos.
Le sigue la quema del templo el domingo y el festival concluye el lunes.