El Cirque du Soleil, creado por los zanqueros Guy Laliberté y Gilles Ste-Croix, se ha convertido en una marca mundial que ha recorrido seis continentes y ha sido avalada por 155 millones de espectadores en más de 300 ciudades de 40 países.
En tres décadas el Cirque ha exhibido más de 30 espectáculos en todo el mundo.
Actualmente, hay como 25 clowns dentro de esta compañía multicultural que se entrenan arduamente para representar ya sea el payaso que enfatiza las acrobacias de los trapecistas y hace reír al público, o el payaso que mira desde fuera lo que ocurre en el escenario.
“El clown es el personaje de todo lo que es increíble en un show de circo, pero también puede resaltar lo que no funciona, lo que la condición humana hace mal, lo que no podemos hacer, ahí los espectadores nos encontramos y eso nos hace reír”, añadió Sheriff, quien lleva trabajando 13 años para esta empresa teatral.
Este personaje, generalmente con la cara pintada de blanco y con una gran sonrisa roja y sombrero de copa, atrae con su dulzura, tristeza ya alegría a los espectadores chicos y grandes, son “un equilibrio entre lo excepcional y lo humorístico, porque el ser humano gravita entre los dos momentos increíbles en su vida”.