MONTERREY.- La obra musical "Jesucristo Súper Estrella" regresó a la Sultana del Norte y en esta ocasión el Auditorio Pabellón M fue testigo de una producción impecable y un elenco de primer nivel.
Durante la primera función, el recinto lució a su máxima capacidad, y no era para menos, al escenario llegaron grandes talentos como Beto Cuevas (Jesús), Erik Rubín (Judas), Lisardo (Poncio Pilatos), María José (María Magdalena), Kalimba (Simón), Samo (Pedro) y la participación especial de Enrique Guzmán como Herodes.
Cuevas dando vida a Jesús fue el primero en aparecer en escena, recibiendo los aplausos del público, así como para cada uno de los artistas que iban apareciendo.
La historia se basa en los Evangelios y cuenta experiencias de Jesús antes y después de la crucifixión. Además, resalta cómo Judas seguía cada uno de sus pasos.
La obra combina tecnología de audio, efectos especiales (agua en el escenario) y sorprendentes videos.
"Yo no sé como amarlo", en voz de María José, erizó la piel, al igual que Kalimba. Mientras que Erik Rubín y Beto Cuevas desataron suspiros.
Durante las dos horas que duró el musical nunca perdieron el ritmo y, al final, todo el elenco tomó el escenario para recibir gran cantidad de aplausos de pie y comentarios positivos de los regios.
Samo dice adiós
Como un gran reto en su carrera, así describe Samo su experiencia dentro de la puesta en escena, de la cual se despide, después de más de 30 funciones, para así continuar con su carrera musical.
"Ha sido un honor ser parte de este elenco. En especial esta puesta es histórica, la producción es espectacular y ha sido un ejemplo a nivel internacional", mencionó. "Me voy a Panamá, Argentina y a Paraguay a realizar un video".
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MONTERREY.- La obra musical "Jesucristo Súper Estrella" regresó a la Sultana del Norte y en esta ocasión el Auditorio Pabellón M fue testigo de una producción impecable y un elenco de primer nivel.
Durante la primera función, el recinto lució a su máxima capacidad, y no era para menos, al escenario llegaron grandes talentos como Beto Cuevas (Jesús), Erik Rubín (Judas), Lisardo (Poncio Pilatos), María José (María Magdalena), Kalimba (Simón), Samo (Pedro) y la participación especial de Enrique Guzmán como Herodes.
Cuevas dando vida a Jesús fue el primero en aparecer en escena, recibiendo los aplausos del público, así como para cada uno de los artistas que iban apareciendo.
La historia se basa en los Evangelios y cuenta experiencias de Jesús antes y después de la crucifixión. Además, resalta cómo Judas seguía cada uno de sus pasos.
La obra combina tecnología de audio, efectos especiales (agua en el escenario) y sorprendentes videos.
"Yo no sé como amarlo", en voz de María José, erizó la piel, al igual que Kalimba. Mientras que Erik Rubín y Beto Cuevas desataron suspiros.
Durante las dos horas que duró el musical nunca perdieron el ritmo y, al final, todo el elenco tomó el escenario para recibir gran cantidad de aplausos de pie y comentarios positivos de los regios.
Samo dice adiós
Como un gran reto en su carrera, así describe Samo su experiencia dentro de la puesta en escena, de la cual se despide, después de más de 30 funciones, para así continuar con su carrera musical.
"Ha sido un honor ser parte de este elenco. En especial esta puesta es histórica, la producción es espectacular y ha sido un ejemplo a nivel internacional", mencionó. "Me voy a Panamá, Argentina y a Paraguay a realizar un video".
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