Ni siquiera en su primer título como técnico Juan Pablo Alfaro deja de lado la autocrítica. A pesar de que reconoció estar alegre por conseguir la segunda estrella para Chivas Femenil, aceptó que tuvieron que sufrir hasta el final y que no le gustó perder en casa.
“Es un sentimiento de felicidad mucha alegría poder colorante en tu casa con tu gente. no fue de la manera que lo hubiéramos deseado pero el equipo estuvo bien en defensa, fue sufrido pero gracias a Dios nos alcanzó para sacar el marcador global adelante”, comentó Alfaro en conferencia de prensa.
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Juan Pablo fue mesurado tras conseguir el campeonato y aceptó que hay que tener paciencia al pensar en un legado que podría ser histórico. Reafirmó las exigencias del Guadalajara y que harán lo posible por seguir compitiendo por el campeonato.
“Tenemos que ir poco a poco paso a paso. El poder tener una dinastía o dejar un legado como es el campeonísimo es difícil, en estos tiempos no es tan fácil, obviamente nosotros torneo a torneo vamos a intentar quedar campeones, es la exigencia de este club así lo exige la grandeza de Chivas”, expresó el técnico rojiblanco.
Aunque parecía enfocarse en el análisis y la autocrítica, Alfaro también aceptó que ahora es tiempo de festejar. Comentó que después de vacaciones será tiempo para evaluar cualquier modificación.
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SARB