Triunfos de esta índole se disfrutan, sí. Pero también dejan lecciones y reflexiones que provocan la alegría no sea total.
Porque Rayados logró el cometido principal de ganar, pero sobre todo, el volver a anotar. Doblegar al Cruz Azul terminó siendo una tarea titánica cuando la prueba no mostraba mayor dificultad. El sinodal se sublevó en momentos y tiempos exactos, pero no lo suficiente para llevarse el botín de Guadalupe, Nuevo León.
Como resultado, El Monterrey sacó un aguerrido triunfo de 3-2 ante una Máquina de guerra, pero que le faltó la fuerza suficiente para reponerse totalmente de un 2-0 parcial.
Son 28 unidades que tienen a los de Victor Vucetich como sublíderes del Apertura, sólo superados por un América que está intratable.
Rayados tuvo un arranque agradable. Agobió la portería de Jesús Corona y encontró un premio sobre el primer cuarto de hora. Jesús gallardo cerró un centro perfecto de Germán Berterame para adelantar al Monterrey sobre el 16.
El 1-0 se quedaba corto para lo que producía La Pandilla… y el 2-0 fue el premio a la insistencia antes del 30. Luis Romo, generoso en el esfuerzo, aprovechó un hueco para sacar disparo que se estrelló en la humanidad de Ramiro Funes Mori e incrustarse en el marco de Corona quien pudo hacer más.
Pero Cruz Azul reaccionó a los dos minutos. Rotondi le ganó el salto a todos tras un centro de Rivero. 2-1.
El complemento inició tan frío para Rayados como la lluvia que cayó anoche. Uriel Antuna, aprovechando un pase filtrado de ‘Charly’ Rodríguez batió a Andrada con un fiero derechazo que se coló en su poste derecho. El 2-2 y quedo en silencio el estadio de Guadalupe.
Pero este Monterrey tiene algo y eso es genialidad en sus individualidades. Después de varios encuentros al fin la dupla Aguirre-Berterame dio muestras de tener una conexión íntimamente futbolística. Tras bajar el uruguayo un balón con elegancia sobre el semicírculo y eludir a un rival cedió al ex San Luis quien saltó un disparo precioso que se anidó sobre el primer poste de Corona. 3-2.
Rayados sacó un triunfo de esos que se gozó porque se requirió algo más que orden táctico Para ganarlo. Era sumar, pero también Vucetich tiene mucho que reflexionar porque en la Liguilla quizá las reacciones no lleguen a tiempo.
Rja