El ahuehuete de Reforma, el cual se colocó en junio de este año sustitución de la palmera que ocupaba el espacio de la conocida Glorieta de la Palma, "ya no tiene vida", aseguró Saúl Alcántara, especialista de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
“El árbol ya feneció, desafortunadamente y lo lamento muchísimo, pero el árbol (ahuehuete) ya no tiene vida”, dijo el experto.
Alcántara aseguró que el ahuehuete probablemente llegó a la Ciudad de México con un cepellón muy pequeño, es decir con la porción de tierra que se deja pegada a las raíces de las plantas para trasplantarlas; con las raíces constriñidas, le cotaron raíces, la traída desde Monterrey, sacarlo de allá a 40° y llegar al Ciudad de México alrededor de 20°.
El experto dijo que las ramas del árbol prácticamente estaban quebradizas, “ya no eran flexibles, el árbol prácticamente estaba muriendo de abajo hacia arriba”.
Saúl Alcántara dijo que la muerte del ahuehuete no se debe tomar como algo político, pues murió por falta de alguna técnica de trasplante.
El experto recomienda sustituir el ahuehuete por otro árbol con una previa preparación.
Follaje del ahuehuete de Reforma brotará en la primavera de 2023: experto
A principios del mes de noviembre, Adrián Cavazos Cavazos, dueño de Viveros Regionales en Montemorelos, Nuevo León, lugar donde se produjo el ahuehuete donado a la capital del país, aseguró que el ahuehuete de Reforma puede recuperar su follaje en la primera de 2023.
“Los sabinos, como se les conoce en el norte, son caducifolios, esto significa que tienen la capacidad de tirar el follaje o desvestirse; es una protección del Taxodium mucronatum que resintió estrés físico y entró en dormancia (un estado de reposo), pero nos va a brotar”, precisó.
Para la mejor adaptación del árbol, especialistas recomendaron mantenerlo en aislamiento, lo que ha permitido disminuir las diferentes presiones a las que el ahuehuete ha estado sujeto, como la compactación del suelo y accidentes automovilísticos.
PGG