El arzobispo de Puebla Víctor Sánchez pidió por el eterno descanso de Norma N, comerciante de la Central de Abastos asesinada y por la niña Génesis , que también perdió la vida víctima de la violencia en el municipio de Cuautlancingo.
Fue durante la tradicional misa de cada domingo en la Catedral de Puebla, que el líder de la grey católica en la entidad pidió por el eterno descanso de las personas que perdieron la vida en la entidad a lo largo de la semana.
Arzobispo de Puebla habla de los asesinatos de Norma y Génesis de 10 años
El arzobispo hizo especial énfasis en dos casos: El primer caso que el arzobispo recordó y por el que pidió que esté en la gloria de Dios fue el de la comerciante Norma, que tenía negocios en la central de abastos y fue asesinada durante un intento de asalto en la Vía Corta a Santa Ana. A la víctima la llevaron a un hospital, pero ya llegó sin signos vitales.
Por otro lado, el arzobispo recordó a Génesis, una pequeña de apenas 10 años que lamentablemente perdió la vida en el lugar en donde residía, hasta el momento se desconoce la causa oficial de este terrible acontecimiento, pero se señala al vecino de la menor por haberle quitado la vida, luego de secuestrarla.
Víctor Sanchez expuso que lamentablemente, la inseguridad continúa aquejando a la entidad y es por ello que pidió específicamente por las almas de estas personas que lastimosamente para el estado murieron de una manera trágica.
Arzobispo lamenta que la violencia le haya quitado la vida a una niña
En este sentido, hizo especial énfasis en que ahora, esta ola de violencia ha tocado a niños, como ocurrió con el caso de la pequeña Génesis, quien aparentemente fue asesinada por un vecino suyo, aunque esta situación todavía no se comprueba por parte de sus vecinos.
“La violencia continúa tristemente, en nuestra ciudad, en nuestro estado, aparecen asesinados, desaparecidos, niños inclusive niñas. Cada ocho días yo pido a Dios por ellos y por sus familias. Te pedimos señor por tu hija Norma, por la niña Génesis”, mencionó.
En este sentido la comunidad católica elevó una oración con la esperanza de que se detengan los casos de violencia en los que personas inocentes mueren.
Posteriormente, el arzobispo continuó con las peticiones normales de cada domingo y asimismo siguió con la celebración eucarística tradicional.
ERV