Año con año, las tradiciones y costumbres cambian y en esta época decembrina no es la excepción. Aunque la iglesia busca mantener vivo el significado de la Navidad, el arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López reconoció que las nuevas generaciones han modificado el propósito de las posadas y la cena de Nochebuena, pero dijo mantener su esperanza en que la verdadera finalidad no se pierda con el paso de los años.
"Son tres elementos que siempre han constituido las fiestas de Navidad. Las posadas, la cena navideña y la misa de gallo. En las tres ha cambiado mucho la sociedad, no solo Monterrey, sino el mundo entero.
"En muchas posadas, por ejemplo, ya no se hace expresamente la relación con el camino de José y María, que buscaban un albergue donde dormir. Lo mismo la cena navideña, aunque siempre evoca la Navidad, a veces se olvida por quién estamos alegres, cuál es el motivo de nuestra alegría y de nuestra convivencia", señaló.
Para evitar que la tradición religiosa sea olvidada, monseñor Cabrera López pidió a los padres de familia y a los abuelos inculcar en los menores el verdadero significado de la Navidad.
"Bueno, yo espero que seamos capaces de transmitir este sentimiento y este pensamiento a las nuevas generaciones. Es muy importante que los niños puedan vivir la posada como siempre ha sido y también que en la cena nunca se olvide decirles a los niños cuál es el motivo de la Navidad. Si tienen regalos del niño Dios, eso vuelve a poner en su corazón la importancia de la Navidad.
- Comunidad
"Yo no me doy por derrotado y creo que es posible resurgir en medio de este mundo cambiante, a veces con su fe un poco aletargada y no evidente. Es posible que se mantenga esta tradición porque forma parte, no solamente de la cultura cristiana, sino también de la cultura mexicana", agregó.
Arzobispo de Monterrey pide olvidar rencores y fortalecer lazos familiares
El arzobispo animó a las familias a aprovechar la Navidad para recuperar el buen ánimo y fortalecer lazos familiares, y si hay problemas, aconsejó rezar y dar el primer paso hacia la reconciliación.
"Yo les recomiendo primero rezar mucho. El que reza crece en el deseo de que las cosas cambien y también atreverse a dar un paso. Si hay alguien con el cual tienes diferencias, te ha herido o tú le has lastimado, Navidad es una ocasión propicia para dar el paso, estirar la mano y recuperar el abrazo, el beso de la familia", indicó.
Para Nuevo León, Cabrera López deseó paz y responsabilidad ciudadana, orar por el cese de la violencia criminal, el cuidado del agua y el surgimiento de vocaciones religiosas y matrimoniales.
"Solamente un buen deseo de Navidad. Yo pediré por todos ustedes, ustedes pidan también por mí y por toda nuestra iglesia. Tenemos una grande responsabilidad en este momento, y solo con la ayuda de todos será posible salir adelante. Perfecto, muchísimas gracias", finalizó.
Por último, reflexionó sobre el fin de año, destacando la importancia de la esperanza y la responsabilidad personal, además de invita a la oración y a la acción en el ámbito familiar y comunitario para enfrentar los problemas globales.
mvls