En el marco del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el deporte destaca como una de las mejores actividades para demostrar que las barreras están hechas para romperse.
Ya sea en el atletismo, el lanzamiento de bala o en cualquier otra disciplina, las personas con discapacidad encuentran en el deporte un espacio para desarrollarse, fortalecer su autoestima y superar los retos del día a día.
A nivel mundial, el deporte adaptado ha tomado un papel importante en la inclusión social. Competiciones como los Juegos Paralímpicos o los Paranacionales Conade en México no sólo muestran el talento de los atletas, sino que también generan conciencia sobre la necesidad de eliminar los prejuicios que aún existen en torno a la discapacidad.
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Joven con parálisis cerebral ha representado a México en Juegos Panamericanos
Ejemplo de ello son atletas como Gabriel Niño Arellano, quien, con parálisis cerebral , ha representado a México en los Juegos Panamericanos en disciplinas como los 400 metros y el salto de longitud.
“Yo empecé el deporte por rehabilitación, por la parálisis cerebral ocupamos movernos y estar en algún deporte para no retroceder”, comentó Gabriel.
Aunque su camino no fue fácil halló su lugar en el atletismo tras probar en otras disciplinas.
“Pasé por varios deportes como el futbol, hasta que llegué al atletismo, donde soy muy bueno”, señaló.
También figura Kevin Iracheta, quien, a pesar de tener una lesión en el plexo braquial, ha brillado en el impulso de bala.
Kevin destaca el impacto personal del deporte en su vida.
“Yo siento que es superación, la mayoría de los atletas nos esforzamos para superarnos siempre… no por una discapacidad nos limitamos a algo, y le estamos dando siempre a la vida”, explicó.
Por su parte, Jesús Salazar, con discapacidad motriz en su brazo derecho, ha encontrado en el lanzamiento de bala una forma de destacarse, mientras que Gael Hipólito Cantú combina el salto de altura y los 200 metros.
Ángela Gabrielle García, de solo 19 años, inspira a otros a seguir sus pasos. Su participación en competencias internacionales como los Panamericanos y campeonatos mundiales es un recordatorio de que la sordera no define sus capacidades ni sus sueños. Su historia es un ejemplo más de cómo el deporte no solo transforma vidas, sino que derriba barreras sociales y culturales.
mvls