La mayor parte de las metas de año nuevo que la gente se propone es adelgazar o buscar una vida más saludable, debido a que se exceden durante las fiestas de Guadalupe-Reyes, no obstante, la especialista en nutrición clínica y deportiva, Marcela Maciel, confirmó que en sus siete años de experiencia, sólo el 50 por ciento de los pacientes cumplen con sus expectativas.
“Casi siempre, todos vienen en enero para cumplir sus propósitos, ya que sí se destramparon en diciembre, yo creo que fácil el 50 por ciento de los pacientes son los que terminan su propósito, su plan; la mayoría, pues sí cumple con las expectativas, se cuidan por su salud, pero sí, un 20 o 30 por ciento desisten a los dos o tres meses”, informó la doctora.
Las citas de pacientes disminuyen entre noviembre y diciembre, ya que durante estas fechas, la gente prefiere continuar gozando de las festividades y despreocuparse ante la comida que ingieren. Mientras que hasta a mediados de enero, después de ingerir la tradicional Rosca de Reyes, y febrero y marzo, aumenta la afluencia de personas.
Es común realizar una evaluación del paciente, el tratamiento no solamente consiste en bajar de peso, sino llevar una valoración interna para conocer el estado de salud de la persona y posteriormente encontrar un plan de alimentación, detalló la doctora, quien además explicó que hay quienes buscan reducir su peso en poco tiempo, incluso más del que adquirieron.
“Hay que llevar una meta, no se puede bajar tan rápido; bueno, depende de cada metabolismo, claro, pero es a veces hasta contraproducente, porque debemos hacer un déficit del paciente, en tanto calórico como protéico. Entonces hay que llevar un balance de cada paciente y llevar un plan de alimentación para que lleguen a su propósito en bajar, ya sea en uno, dos o tres meses, según el paciente”, mencionó Marcela Maciel.
Cabe señalar que la doctora no prohíbe alimentos grasos durante la festividades decembrinas, debido a que los tratamientos no consisten en castigar el goce de comer antojitos, ya que el único requisito es que se lleve una dieta balanceada, equilibrando carbohidratos y lípidos para contar con un balance adecuado. Además, antes de que comiencen las festividades, la especialista prepara una dieta hipercalórica para sus pacientes.
“Que sea una ingesta un poco más baja, para que puedan cenar y puedan aventarse el recalentado esos días, y cuando ya regresen en enero, ya no sea tanto el peso que me hayan aumentado o que lleguen como tablas, por llamarlo así, y de ahí ya basarnos a bajar, recuperar y obviamente, pues hacer ejercicio para volver a tener ese cuerpo que queremos”, especificó la especialista.
Por último, Marcela insistió que las personas que tengan alguna patología, deben ir acompañados de personal de salud y no automedicarse o inventarse dietas, que a largo plazo pueden perjudicar al organismo. Es preferible llevarlos de la mano con actividad física, sin embargo, para tener un cuerpo sano por dentro y por fuera, el 80 por ciento depende de la alimentación.
AA