Huauchinango es el hogar de las azaleas, flores de gran tamaño y colores muy llamativos, que incluso representan al municipio ubicado en la Sierra Norte de Puebla.
La azalea es la joya de la corona en la Feria de las Flores de Huauchinango, y existe en más de 150 variedades. En entrevista para MULTIMEDIOS, Rodolfo Estudillo, presidente de la Asociación de Floricultores, compartió que desde hace 84 años se lleva a cabo la tradicional feria, en la que la azalea es protagonista.
Mencionó que en el pueblo mágico se preserva una colección de más 650 azaleas de diferentes colores y tamaños; resaltó que la mayoría de los 'huauchinanguenses' tienen una azalea en su casa y en los viveros se cultiva más del 90 por ciento de la producción de esta planta en el país.
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Durante los meses de febrero y marzo, los botones de la azalea abren y presumen flores de múltiples colores; moradas, rojas, blancas, rosas, jaspeadas y de nuevas tonalidades. A decir del floricultor, las primeras en florear son las blancas y las últimas las de colores intensos como el rojo.
Detalló que hay azaleas que pasan con las familias varias generaciones, es el caso de la más antigua que cuenta con 104 años; misma que ha sido cuidada por la familia del floricultor desde su abuelo, su padre y ahora él.
“Ellos empiezan con una azalea de tamaño de un metro, se reproducen y crecen; quienes las cuidaron fallecieron, pero dejan la herencia de esta tradición a los hijos”, mencionó.
Expresó que para él, es como si sus familiares vivieran a través de la azalea. Además, de que cuentan con ejemplares de más de 50 años.
Azaleas: color y tradición serrana
Año con año, todos los floricultores de la región participan en la Feria de las Flores, evento en el que las tonalidades más buscadas son las azaleas finas y las dobles; las más sencillas es común verlas en parques, jardines y camellones.
Esta colorida y peculiar flor oscila desde los 20 pesos hasta los 50 o 70 mil pesos; dependiendo de los años de antigüedad y los cuidados que requieren.
La Asociación de Floricultores cuenta con 19 agremiados, que con esfuerzo y dedicación cada año hacen posible la realización de la feria; evento que forma parte de la celebración al Señor en su Santo Entierro, patrono de la localidad.
Rodolfo Estudillo, señaló que cada variante de azalea tiene un nombre diferente, tales como excélsior, azalea de mar, de ladrillo, satélite, europea; sin embargo, de manera reciente a los nuevos ejemplares les pusieron el nombre de la reina de la Feria de las Flores, que este año es Elizabeth Rodríguez.
El productor indicó que desde sus inicios la feria es una ofrenda que realizan los fieles, por ello, continúan con la tradición año con año. Además, debido a su importancia cultural, en cada exhibición se ven beneficiados económicamente.
Recordó que este importante evento fue suspendido por dos años a causa de la contingencia sanitaria; por lo que, la reactivación representa la oportunidad de llegar a más personas para que se interesen en adquirir estos ejemplares.
Para llevar a cabo este evento, los habitantes de este municipio se preparan desde noviembre, eligen los ejemplares que van a participar dependiendo cuál está a punto de abrir, cuál va a aguantar y cuál no.
“No es nada sencillo presentar esta exposición, nosotros como floricultores tenemos que ingeniárnosla para que se llegue al punto de floración, no es que la tengo en mi jardín y ya la llevo”, explicó.
Los floricultores de este pueblo mágico también llevan sus ejemplares a la Ciudad de México, a los viveros de Coyoacán, por lo que Estudillo refirió que la azalea ha cobrado una importancia al exponerse en otros sitios de interés.
Aunque la mayoría de ejemplares son de exhibición, si alguien está interesado en adquirir una azalea debe tener en cuenta que son de amplio tamaño y llegan a crecer hasta tres metros, puede lo cual debe acudir a los floricultores para que le brinden orientación y se lleve la que sea de su agrado y cumpla con su espacio.
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