La Batalla del 5 de mayo de 1862 es recordada como el evento histórico más importante del intento de intervención francesa en México, sin embargo, previo a esta fecha ocurrieron otras batallas relevantes que de no haber ocurrido, la victoria del 5 de mayo no se hubiese logrado.
Uno de los eventos significativos fue la Batalla de Atlixco del 4 de mayo de 1862, la cual se libró en las inmediaciones de la Hacienda la Trampera, las fuerzas republicanas al mando de Tomás O´Horán derrotaron a las tropas encabezadas por Leonardo Márquez, acontecimiento que marcó el triunfo al siguiente día y que quedó relatado en las litografías que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) compartió a TELEDIARIO Puebla.
Historia de la Batalla de Atlixco
De acuerdo con los historiadores, la tarde del 2 de mayo llegó el general Tomás O’Horán y mil 500 hombres de las armas infantería, artillería y caballería desde Ozumba a la angelópolis. Se trataba del refuerzo que el gobierno republicano enviaba para apoyar en Puebla. Una vez en la ciudad de los ángeles, O’Horán informó al general Ignacio Zaragoza sobre el avance del ejército conservador a cargo del general Leonardo Márquez con mil 500 elementos, en el camino de Izúcar.
Por otra parte, el ejército francés había arribado a Amozoc de Mota el 4 de mayo con 5 mil 500 efectivos, por lo que el apoyo de Márquez a los invasores hubiera sido definitivo para la Batalla del 5 de mayo, ya que ellos podrían atacar por el sur, mientras que los invasores por el este. Ante ello, el general Zaragoza ordenó movilizar las tropas mexicanas hacia Atlixco para reducir el apoyo conservador.
A las 9 de la mañana, el general Tomás O´Horán y el Batallón Libres de Atlixco llegó a Cholula y siguió hacia Atlixco por los ranchos de Santa Ana Acozautla y de los Molinos. Una vez en San Gregorio Atzompa, alrededor de las 11 de la mañana, se encontraron con 500 militares expedicionarios de Leonardo Márquez, por lo que hubo un intercambio de tiros. Los republicanos empezaron a envolver al enemigo, sin embargo, se ordenó la retirada hacia Atlixco para que la batalla fuera apoyada por el grueso de las tropas conservadoras.
La afrenta siguió y Leonardo Márquez fue perseguido por los soldados del general O´Horán. Cerca del río Alseseca, en un puente ubicado antes del rancho de Los Molinos, las tropas mexicanas tuvieron ventaja y repelieron el ataque al grito de “Viva México” y “Mueran los traidores”, por lo que se inició la retirada de Márquez hacia Izúcar con un ejército reducido, así como artillería y armas abandonadas.
A las 6 de la tarde, las tropas mexicanas rindieron informe al general Zaragoza sobre la victoria en Atlixco y retornaron hacia la Ciudad de los Ángeles para integrarse a las filas que combatirán al día siguiente en Los Fuertes.
La noche de ese mismo 4 de mayo el conde de Lorencez ya había trazado su plan de ataque en Amozoc. A las 7 de la mañana hizo alto en la Hacienda del Álamo, donde todo estaba preparado para iniciar el combate contra las fuerzas republicanas al mediodía del 5 de mayo de 1862.
AGA