La crisis de desapariciones en Jalisco se perfila como uno de los mayores desafíos que enfrentará el gobernador electo, Pablo Lemus Navarro, al asumir su cargo el próximo 6 de diciembre.
Especialistas en estudios políticos y líderes de colectivos de búsqueda coinciden en señalar que la desaparición de personas debe ser una prioridad en la agenda del nuevo gobierno, ya que el estado ha experimentado un alarmante incremento de casos en los últimos años.
Juan Jesús Ramírez, académico en estudios políticos de la Universidad de Guadalajara, destacó que el reconocimiento del problema por parte de Lemus es una buena señal.
"Me parece que es una buena señal el reconocimiento del problema, el gobernador electo ya próximo a entrar lo ha reconocido y, sin duda, es la gran dificultad que se enfrenta", señaló Ramírez, quien considera que la desaparición de personas es el reto más urgente en el estado.
Por su parte, Indira Navarro, líder del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, expresó que como familia de víctimas y representante de los colectivos, mantienen la esperanza de que, con la entrada de Lemus y su equipo, se logren avances en la búsqueda y atención a los desaparecidos.
"Hasta ahorita se han tomado en cuenta todas las propuestas que hemos presentado, hemos tenido respuesta, nos han tomado en cuenta. Todavía tenemos fe en que las autoridades puedan hacer un cambio", indicó Navarro.
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Ambos coinciden en la necesidad de una mayor colaboración entre los colectivos de búsqueda y las autoridades, y se mostraron esperanzados ante la creación de la nueva Secretaría de Inteligencia y Búsqueda de Personas, que estará encabezada por Edna Montoya. Navarro destacó que esperan que esta nueva instancia permita una mayor coordinación y eficacia en los esfuerzos de búsqueda.
"Ya tenemos una reunión programada para el día 9 de diciembre con el gobernador, y esperamos tener todo planchado para avanzar en las acciones", comentó.
No obstante, Ramírez también subrayó que el reto no solo radica en reconocer el problema, sino en dotar a las nuevas estructuras de los recursos necesarios para hacer frente a la magnitud de la crisis.
"De entrada, bien que haya estos nuevos espacios, pero lo siguiente es ver si tendrán presupuesto suficiente y cómo están diagnosticando el problema. A partir de ese diagnóstico, se podrán implementar soluciones efectivas", apuntó el especialista.
El próximo gobierno de Pablo Lemus tiene, por tanto, la responsabilidad de no solo reconocer la magnitud del problema, sino también de garantizar que las acciones sean respaldadas con los recursos y el personal adecuado para enfrentar la grave situación de desapariciones en Jalisco.
AA