En punto de las 5:00 de la mañana de este jueves 12 de diciembre, decenas de familias saltillenses se dieron cita en el Santuario de Guadalupe para honrar y celebrar el Día de la Virgen, en donde los fieles católicos agradecieron a la madre de Cristo por los milagros cumplidos mientras que otros más acudieron para pedir su ayuda.
La celebración por el Día de la Virgen de Guadalupe inició desde este miércoles a las 11:00 de la noche, cuando los ciudadanos se reunieron para cantarle las tradicionales mañanitas y acudir a las misas celebradas durante este día.
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Al exterior del Santuario de Guadalupe han sido colocados diversos puestos de antojitos mexicanos y artículos religiosos, lo que ha provocado una gran afluencia de personas y el tráfico pesado en la calzada Emilio Carranza, en la Zona Centro de Saltillo.
Las misas durante este jueves se han estado celebrando cada hora y finalizarán hasta las 8:00 de la noche, por lo que los saltillenses han estado acudiendo a fin de agradecer a la Virgen María por las bendiciones que ha dado a las familias, y también están aquellos que acuden para pedir por salud y bienestar para sus seres queridos
“Yo necesito y quiero pedirle a la Virgen de Guadalupe un milagro para mi hijo, madrugamos, si necesitamos un milagro, y yo digo: ‘como eres madre, me comprendes’ como madre estoy segura de que ella y Jesucristo me van a ayudar”, señaló Claudia, una saltillense.
“Ahorita nos juntamos para venir a agradecer a Dios y a la Virgen, a felicitarla en su día, y estamos muy felices y gozosas”, dijo Mayra.
Así fueron las mañanitas a la Virgen de Guadalupe en Saltillo
Ni el frío de la madrugada ni el cansancio del día lograron detener la fe de miles de fieles que se congregaron en el Santuario de Guadalupe para rendir homenaje a la Virgen Morena, en una de las tradiciones más arraigadas de Saltillo. En punto de las 12:00 am de este 12 de diciembre, las mañanitas resonaron con fuerza en las voces de los creyentes, quienes con velas en mano y corazones llenos de esperanza dieron inicio a una jornada llena de devoción y gratitud.
Desde muy temprano, familias enteras comenzaron a llegar al santuario, ubicado en la Zona Centro de la ciudad. Con niños vestidos como pequeños Juan Diego y algunos incluso caracterizados como la Virgen de Guadalupe, los asistentes se unieron en una procesión de fe que llenó las calles aledañas.
Saltillenses agradecen a la Virgen de Guadalupe por los milagros
Muchos llegaron para agradecer los favores recibidos; otros, para pedir por salud, trabajo o la resolución de problemas que los aquejan.
“Tenemos mucha devoción, mucha a la Virgen de Guadalupe, venimos a pedir que siempre nos dé salud”, señaló Rosalinda Barbosa, una de las asistentes.
En medio del bullicio, los Matlachines tomaron el protagonismo. Ataviados con trajes coloridos y penachos que se mecían al ritmo de los tambores, ofrecieron sus danzas como tributo a la Virgen. Cada paso y movimiento era una oración viva, un acto de fe plasmado en su arte.
Entre la multitud destacó la familia Torres, que instaló un pequeño puesto frente al santuario donde repartieron atole y café caliente a los asistentes.
“Van dos ocasiones solamente y pues el objetivo es darle gracias a la Virgen de Guadalupe por lo que nos ha dado, y para que el próximo año nos permita tener mucha salud. Es ofrecer en el nombre de la Virgen café o champurrado caliente, para ayudar en lo que se pueda”, expresó Fátima Torres, una de las integrantes de la familia.
Este gesto de generosidad fue recibido con gratitud por quienes, tras largas horas de espera, encontraron un alivio en el calor de las bebidas.
A lo largo del día, miles de fieles continuaron llegando al santuario. Las veladoras, colocadas como símbolo de las peticiones y agradecimientos, formaron un espectáculo luminoso que reflejaba la devoción de los saltillenses. Las calles alrededor del templo se llenaron de vendedores que ofrecían desde figuras religiosas hasta antojitos típicos, dando un toque festivo a la solemnidad del evento.
La celebración del Día de la Virgen de Guadalupe en Saltillo, como cada año, se convirtió en un espacio donde tradición, cultura y fe se entrelazaron, recordando que la devoción a la “Madre de México” sigue siendo una de las expresiones más profundas del pueblo mexicano.
KM