De los múltiples problemas a los que se deben enfrentar las más de 20 bibliotecas municipales que existen en la ciudad de León, la falta de organización y sobre todo, la difusión, son unos de los principales.
Como ejemplo de ello, de acuerdo con Luz Adriana Torres Aguirre, de la Biblioteca Municipal ‘Nicolás Rangel’, misma que se ubica en la colonia Santa María Granjeno, han observado en la zona que las personas no se acercan a este centro, aún cuando son mismos vecinos de la zona.
Así mismo, comentó en entrevista que ello se debe a que los leoneses no conocen esta biblioteca, esto pese a que es un centro que se ha ubicado en ese lugar desde hace ya muchos años.
Según comenta, para resolver este problema han recurrido a estrategias para atraer a un poco más de público, entre las cuales se encuentran la realización de talleres que permiten que los más pequeños se adentren en la lectura.
“Y ahorita pues la idea es promover otra vez talleres que van enfocados a los niños, porque sí, este, anteriormente no se podían dar tantos talleres, y ahorita lo que estamos haciendo es volver a jalar a los niños”, explicó.
No obstante, comenta que la escasa difusión puede derivarse de la poca organización que existe en el centro, pues más allá de que no existe un coordinador responsable del mismo, sino un supervisor que pocas veces se presenta, tampoco se ha integrado un comité en la colonia que pueda escuchar las necesidades del centro y les brinde su apoyo.
“Cada colonia, cada centro tiene su comité, y nos apoya mucho el comité en cuestión de que alguna actividad, algún evento ellos mismos difunden la información. Sí hay una persona que nos apoya mucho, pero no hay comité como tal. No sé a qué se deba”, agregó.
En sus palabras, probablemente las personas acudirían con más frecuencia a la biblioteca, e incluso se contarían con más recursos si hubiera un comité dispuesto a apoyarlos.
PCQG