La Dirección del Instituto Municipal del Deporte ha emitido un comunicado informando sobre el cierre temporal de la Alberca 450 debido a la detección de materia fecal en el agua. La decisión de suspender las actividades en este espacio fue tomada durante la mañana del miércoles.
En las primeras horas del día se descubrió la presencia de excrementos en la alberca, lo cual requiere un proceso de tratamiento especial que demanda más tiempo del habitual para su corrección, siguiendo las directrices de las autoridades de salud. El objetivo primordial es asegurar que el agua utilizada para la práctica de la natación esté en condiciones óptimas.
¿La introducción de los materia fecal fue intencional?
Liliana Juárez, directora del instituto, ha proporcionado detalles adicionales sobre la situación. Ha señalado que no ha sido posible determinar si la introducción de los excrementos fue intencional o si fue resultado de complicaciones médicas de algún usuario de la alberca. Ha explicado que el procedimiento a seguir, de acuerdo con las indicaciones de las autoridades, involucra la eliminación de los excrementos y un proceso intensivo de cloración del agua, seguido de filtrado en un rango de 6 a 10 veces.
Cada ciclo de filtrado requiere aproximadamente entre 6 y 8 horas. Por tanto, se ha decidido cerrar temporalmente la alberca para llevar a cabo este proceso de manera adecuada, asegurando la seguridad de todos los usuarios y evitando riesgos para la salud.
Una vez que se haya completado este procedimiento, se llevarán a cabo análisis del agua por parte de COPRISED para asegurar que no haya riesgos para los usuarios. Una vez obtenidos resultados favorables, se procederá a reabrir la alberca en el momento apropiado. Aunque este cierre temporal pueda resultar inconveniente, es fundamental para asegurar la higiene y seguridad de las instalaciones, y para mantener la calidad del servicio que se ofrece a la comunidad. La prioridad es la salud y el bienestar de los usuarios de la alberca.
EC