Desde hace más de 10 años Juana Catalina Estala Lozano busca a su hijo José Cruz Sánchez Estala, desaparecido en Reynosa, Tamaulipas, por ello hoy, y como en años anteriores, junto a la Agrupación de Mujeres Organizadas por los Ejecutados, Secuestrados y Desaparecidos de Nuevo León y Tamaulipas (AMORES), realizan el recorrido por los siete templos.
Para recordar, dijo, el proceso que vivió Jesús y el calvario que como él sufren los familiares de personas desaparecidas.
“Cada año el grupo AMORES hacemos este recorrido en memoria de nuestros seres queridos desaparecidos.
“Y esto nos hace recordar el proceso injusto que pasó Jesús donde lo apresaron buscando a falsos testigos que lo llevaron a la crucifixión”, comentó.
En el calvario que viven los familiares, comentó, está el poco o nulo avance que ven para que se resuelvan sus casos.
Por ello, el peregrinar de los familiares de personas desaparecidas de AMORES y en general, continúa con la única esperanza de hallar a su ser querido.
“Esta perversa historia vuelve a repetirse con las familias que tenemos personas desaparecidas, porque vivimos el calvario de andar buscando a nuestros seres queridos.
“Donde nos traían de un lado a otro en la Fiscalía, en la Sedena, en la Marina, en la antisecuestros, como trajeron a Jesús de Herodes a Pilatos”, precisó.
Aunque han pasado ya muchos años, expresó, la esperanza se mantiene, a pesar de que los procesos van lentos y no caminan.
“Este recorrido lo hacemos con mucha fe y esperanza de que tarde que temprano vamos a tener verdad y justicia y vamos a saber dónde están”, puntualizó.
Dentro de su recorrido de esta mañana, compartió, está iniciar en la Catedral de Monterrey y pasar luego a las iglesias Dulces Nombres, El Roble, San José, Perpetuo Socorro, Sagrado Corazón y Dolores.
cog