Después de esperar por varias horas, familias de los internos del penal San Miguel de Puebla, pudieron ingresar al Cereso sin "pases oficiales".
Un grupo de aproximadamente 30 mujeres se plantaron frente a la caseta de vigilancia del penal de San Miguel para exigir su entrada luego de que se les negó por la falta de un pase oficial, hecho que señalaron como absurdo ya que durante años se les permitió ingresar a cambio de "un pago debajo de la mesa", señalaron las familias a TELEDIARIO.
La mañana del jueves, más de 100 familiares de reos esperaron a las afueras del penal de San Miguel para tener noticias sobre los internos de quienes no tenían información desde el lunes y, después de varias horas de espera, 30 de poco más de 50 mujeres que pretendían visitar a sus familiares fueron desalojadas de la prisión luego de pedirles el "pase oficial".
Esta solicitud no pudo realizarse con tiempo debido a que el lunes 24 de enero se realizó una "limpia" en la prisión; además, el trámite se debe pedir previo a las visitas y desde el interior del Centro de Reinserción Social (CERESO) por parte del preso.
Dadas estas condiciones, las mujeres comenzaron a reunirse y advirtieron que de no ser escuchadas sus peticiones para corroborar la situación actual de sus familiares, comenzarían un bloqueo en los accesos del penal de San Miguel.
Ante la amenaza de las mujeres, el jefe a cargo de la caseta de vigilancia estatal permitió el acceso al grupo de manifestantes, a quienes finalmente no se les pidieron documentos oficiales, ni sobornos.
Finalmente, las familiares de los internos pudieron tener acceso n esta ocasión bajo la orden de "entrar a verlos rápido, pero no queremos más problemas ni adentro, ni fuera".