Después de dos años de abandono por la pandemia y sequía y 12 años sin mantenimiento, La Fuente de la Vida, mejor conocida como la Fuente Neptuno, volvió a cobrar vida y brillar a todo color.
Iluminación potente con lámparas Led y chorros de agua tipo trenza revivieron desde la noche de este jueves a las emblemáticas esculturas.
Aunque aún no es la inauguración oficial de la icónica fuente, programada para el próximo mes, funcionarios de Parque Fundidora iniciaron las pruebas de iluminación y del sistema hidráulico, cuya inversión alcanzó los 5 millones de pesos.
Paseantes y turistas se detienen ante el paisaje de color y ahora rellena de agua que no se había visto desde antes de la pandemia del covid-19 y después por la sequía.
José María Garza Cisneros, director de Infraestructura Sustentable y Obra de Fundidora, inició las pruebas correspondientes de la restauración de la fuente, que conforma la remodelación de toda la Macroplaza, cuya inversión asciende a los 24 millones de pesos.
jvl