Los primos Alan Orlando y Milton Sahir, ambos de apellido Castillo, desaparecieron el 21 de junio en la colonia El Álamo, en San Pedro Tlaquepaque, Jalisco, por lo que el 30 de agosto, Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, sus madres reunieron a más de 100 familiares para celebrar una misa y pedir que sus seres queridos vuelvan a sus hogares pronto.
“Yo nomás quiero que me lo regresen como esté, ya no queremos culpables ni nada, yo nomás quiero que me regresen a mi hijo y a mi sobrino, ellos desaparecieron en El Álamo y ya de ahí ya no supimos nada, quien los tenga regrésenmelos como estén, no pedimos culpables”, dijo Karla Lizeth, madre de Milton.
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A pesar de la fuerte lluvia que se registró durante la tarde, más de 100 integrantes de los colectivos Entre Cielo y Tierra y Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco (Fundej), llegaron hasta la glorieta de Las y Los Desparecidos en Guadalajara para celebrar la misa.
En el lugar estuvieron presentes madres, padres, hermanos e hijos, quienes llevaron cartulinas, lonas y camisas con las fotos de sus seres queridos, acompañado de flores y veladores que se colocaron en el altar que les dedicaron a los desaparecidos, junto a la imagen de la Virgen de Zapopan.
La lluvia acompañó a los presentes durante toda la ceremonia, lo que fue considerado como un signo de purificación y sanación para las miles de personas sin localizar que hay en Jalisco y en el país, y sus familias, a quienes se dedicó el discurso.
“Muchos de sus seres queridos o ustedes mismos también son victimizados, también llega a darse en el señalamiento (…) Cuando los insultan, cando los injurian, cuando también lo señalan, cuando también como si fuera una buena recomendación dicen ya quédate en paz, ya nomás encomiéndalo”, explicó Ricardo Armando Díaz, párroco presente en la misa.
Por parte de los colectivos, se pidió a las autoridades priorizar las búsquedas de personas en vida.
“La mayoría de los colectivos se dedica a buscar en fosas, nosotros somos un colectivo que no descartamos obviamente las búsquedas en el Semefo, pero damos prioridad a la búsqueda en vida, con esa fe de encontrarles, de localizarles. Este es un día muy triste, un día, una fecha que no debería existir”, dijo Marleti, líder del colectivo Entre Cielo y Tierra.
Al término de la misa, los familiares se colocaron alrededor de la glorieta y sobre los carriles centrales por varios minutos, donde entre cánticos y oraciones pidieron una vez más por sus seres amados.
AA