Las albercas municipales del Fraccionamiento Benito Juárez, en Guadalupe se convirtieron en un establo, que genera problemas de salud e inseguridad a los habitantes.
El espacio público que se ubica en el cuadrante de las calles Plateros y Marcelino Juárez entre Francisco Márquez y Benemérito de América, está abandonado desde hace dos años lo que ha provocado que la hierba crezca y el agua se estanque en las albercas, generando la proliferación de mosquitos.
Esta situación ha sido aprovechada por los propietarios de caballos que aprovechan para llevar a los equinos a pastar e incluso ahí los dejan por largas temporadas, sin limpiar el excremento que dejan.
Además, los cuartos que eran baños y oficinas, son ahora guarida para viciosos que ingresan a todas horas a consumir sustancias ilícitas.
Los habitantes del sector aprovecharon para denunciar también la falta de alumbrado público en la calle Agustín Melgar, problema que tiene más de un mes y ha propiciado robos de autopartes.
Además, los vecinos de la calle Niños Héroes denunciaron que esta vía es intransitable por los pozos que se formaron a causa de una fuga de aguas negras que nadie ha atendido y ya tiene más de tres meses.
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