Los guardias de seguridad privada de planteles educativos como escuelas preparatorias y universidades en Guadalajara no están capacitados para situaciones de riesgo, así como aseguran que trabajan en condiciones precarias y se enfrentan a jornadas extenuantes y bajos sueldos.
Dependiendo de la empresa para la cual trabajen, el sueldo de los guardias de seguridad oscila entre los ocho y 10 mil pesos mensuales con turnos de 12 o 24 horas y con prestaciones mínimas de ley, de acuerdo a bolsas de trabajo.
“La mía ahorita es de 12 horas con un día de descanso, sueldo con cuatro mil pesos, sí es bajo pero es lo que paga la seguridad, y los compañeros que trabajan 24 por 24, a ellos leva peor”, explicó uno de los guardias que prefirió mantener su anonimato.
Este guardia de seguridad tiene más de 15 años realizando esta labor, y ha sido responsable de la vigilancia de varios planteles escolares, y percibe ocho mil pesos al mes.
Para entrar a una empresa de seguridad privada, la mayoría de estas sólo piden que los interesados hayan concluido la secundaria o el bachillerato, y una experiencia mínima de seis meses, sin que exista algún tipo de capacitación para actuar ante una situación de riesgo.
Los guardias no pueden actuar durante una situación de riesgo
En caso de que se presente algún hecho de inseguridad al interior de un plantel, los guardias están impedidos para actuar, por lo que deben llamar a la policía.
“Nosotros no podemos enfrentarlo con el torete, pues no, hablar al 911 o activar el botón de alarma (…) Si está haciendo algo, pues sacarlo o someterlo, golpearlo menos, avisar a la policía que ellos se encarguen”, detalló el guardia.
Por para el especialista Montialberti Serrano, la seguridad no debe recaer sólo en el personal privado, el cual no cuenta con el perfil adecuado, sino también en la implementación de recursos tecnológicos.
“Desgraciadamente el perfil que se tiene para los guardias de seguridad no es el idóneo, ocupa capacitación, las edades (…) Una persona tiene que trabajar de 12 a 24 horas y las personas tienen 50 o 60 años (…) Se le ha apostado a las empresas de seguridad privadas, casi todas las universidades, los comercios la han implementado, pero creo que se debe apostar a la tecnología y menos al factor humano”, explicó Serrano.
A pesar de que algunas escuelas ya implementaron tecnología en sus ingresos como el uso de torniquetes y scanners, todavía existen muchos planteles donde la entrada sigue siendo controlada por guardias de seguridad que no tienen la capacitación adecuada y laboran en precariedad.
AA