Entre lágrimas y aplausos un aproximado de 100 personas le rindieron homenaje a la activista Elena Larrea, que falleció a sus 30 años el pasado 19 de marzo, víctima de una trombosis tras presentar un coágulo en el pulmón, según familiares y amigos.
Fue el 23 de marzo, a las 06:00 horas, cuando poco a poco iban llegan las personas a la Rotonda de las y los Jaliscienses Ilustres en el centro de Guadalajara. Todos los presentes vestían de blanco y traían veladoras, que representaba la paz y la gran labor que hizo Elena Larrea en vida para proteger a cientos de caballos que sufrieron de abuso y maltrato.
Carolina Peña, amiga de la activista, recordó a Elena como una mujer “sumamente hermosa” y que “tenía un corazón gigante”, la cual, dejó un legado que no se olvidará por mucho tiempo.
“Era una mujer con un corazón semblante, una energía sumamente enorme. Yo la verdad la admiro bastante y espero que, primeramente Dios, en el cielo nos esté cuidando”, agregó Carolina Peña.
Piden investiguen la muerte de Elena Larrea
Sin embargo, eso no fue todo, ya que algunas personas exigieron se investigue la muerte de la activista pues supuestamente había recibido amenazas que quedaron registradas en redes sociales. Por ello, califican como extraña su muerte.
“La habían amenazado. Había jueces implicado, la jueza Myriam Huerta y el fiscal Alan Villegas”, señaló la activista Gloria Ávila.
De acuerdo con esta mujer, los antes mencionados tienen relación con Liverio ‘N’, quien supuestamente abusó sexualmente de la potranca Camila, y quien permanece fuera de prisión. Elena Larrea estaba involucrada en el caso, ya que exigía justicia para el animal.
A Elena le tocaba presentarse el 26 de este mes en audiencia, testificando contra Liverio ‘N’. Pero su muerte llegó de manera repentina y de una forma que nadie esperaba, ya que Elena parecía una mujer fuerte y sana.
“Se muere unos días antes, eso es muy extraño”, señaló Gloria.
A pesar de todo lo anterior, al final del homenaje las y los activistas realizaron un dibujo en el piso de la Rotonda de las y los Jaliscienses Ilustres con el símbolo que Elena Larrea tanto amaba, siendo estos los caballos, por los que luchó hasta el último día de su vida y por los que creó Cuacolandia. Un santuario dedicado a la protección de equinos, donde los animales reciben comida, atención médica y el amor que se merecen.
MRG