El elevador del puente peatonal que conecta la carretera San Sebastián El Grande a la altura del Hospital General Regional 180 tiene cuatro años fin funcionar, de acuerdo con derechohabientes del hospital.
Héctor Eduardo Aguirre Sánchez tiene hernia discal, necesita una andadera para caminar. Es uno de los pacientes de la clínica 180 que depende del puente peatonal para cruzar de manera segura la vialidad pues avanza a paso lento. Ante la falta de elevadores sube por la rampa y tarda hasta media hora en llegar al otro lado.
"Pues yo tengo que pasar todo el puente hasta el otro extremo porque de este lado los sitios cobran bien caro y allá de aquel lado te cobran menos […] Por eso optamos por subir hasta allá y salir hasta allá y en las condiciones en las que está uno yo me cuento como los afectados, es que ya con el elevador ya sería diferente, ya nomás sería un tramo”, mencionó Héctor.
El esposo de Griselda Montaño Guzmán usa silla de ruedas pero a diferencia de Héctor, la mujer prefiere no utilizar el puente peatonal pese a lo peligroso que esto pueda ser ya que la rampa está muy inclinada y empujar la silla de ruedas se vuelve una tarea titánica.
"Esperar a que los carros se paren porque a veces no alcanza uno a pasar y es donde pasan los accidentes […] deberían arreglarlo porque es necesario. A veces arreglan otras cosas que ni siquiera se ocupan y los elevadores que la verdad sí se ocupan no les ponen mano", dijo el esposo de Griselda Montaño Guzmán.
El puente peatonal es la única manera de cruzar de manera segura ya que ni siquiera hay camellón en la parte central.