La tranquilidad de la noche del lunes 9 de diciembre se vio interrumpida en León, Guanajuato, cuando una fuerte explosión sacudió el restaurante Kentucky Fried Chicken, ubicado en la Plaza Obelisco.
El incidente, ocurrido alrededor de las 10:00 p.m., provocó alarma entre vecinos y transeúntes, dejando daños materiales significativos y destacando la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en establecimientos comerciales.
De acuerdo con los primeros reportes proporcionados por Protección Civil, el percance fue originado por una fuga y acumulación de gas en una de las líneas que abastecen las planchas y las freidoras del restaurante. Este tipo de incidentes suele ocurrir cuando se presenta una falta de mantenimiento adecuado o negligencia en la detección de fugas de gas.
Tras recibir los reportes, elementos del Cuerpo de Bomberos de León, así como personal de Protección Civil, acudieron rápidamente al lugar. A su llegada, constataron que los cristales del local estaban destrozados y que un fuerte olor a gas inundaba el ambiente.
El equipo de emergencia procedió a evacuar tanto a los trabajadores; afortunadamente, no se reportaron personas heridas, lo que minimizó la gravedad del incidente.
Daños materiales tras explosión en KFC de León
Aunque el evento no dejó víctimas, los daños materiales fueron significativos. Los vidrios del local quedaron esparcidos por el suelo, y varias estructuras internas del restaurante presentaron afectaciones. Además, se realizó una inspección detallada para garantizar que no hubiera riesgos adicionales en las inmediaciones.
La Secretaría de Seguridad, Prevención y Protección Ciudadana hizo un llamado a los propietarios de negocios que operan con gas LP o natural para reforzar las medidas de seguridad y realizar inspecciones regulares en sus instalaciones.
El incidente dejó a la comunidad preocupada por la seguridad en los espacios públicos, especialmente en centros comerciales y establecimientos de alto flujo de personas. Este incidente resalta la importancia de contar con protocolos de seguridad efectivos y de dar mantenimiento constante a las instalaciones que manejan gas.
Aunque en esta ocasión las consecuencias fueron únicamente materiales, no deja de ser una alerta para reforzar las medidas de prevención en beneficio de trabajadores, clientes y comunidades enteras.