Los contingentes de calaveras dieron un paseo en las calles de la Angelópolis para celebrar el Día de Muertos.
Bajo un ambiente de música y mucho color, los poblanos disfrutaron de la edición 16 del Festival Tamalista, en el que grupos de artistas recorrieron las principales vialidades de la ciudad de Puebla con cráneos y huesos para cerrar las actividades del 2 de noviembre.
Las calaveras gigantes elaboradas de cartonería salieron desde el Centro de Bienestar Social de Xonaca en la calle 22 Oriente, después avanzaron hasta el bulevar 5 de Mayo hasta la calle 2 Oriente, después dieron vuelta en la calle 2 Norte hasta avenida Juan de Palafox y Mendoza, y de ahí regresaron al punto de partida.
Cerca de 200 personas del colectivo Tamalista le dieron vida a las huesudas para alegrar la festividad que se realiza desde hace 16 años. En entrevista, Claudia Rodríguez, quien forma parte de los organizadores, explicó que esta procesión comenzó por idea de Daniel Bello, un artista plástico que en el año 2006 decidió elaborar un títere gigante e impartió talleres para niños jóvenes con el objetivo de que las tradiciones mexicanas no se vieran desplazadas por el Halloween.
Con el paso del tiempo esta actividad revolucionó hasta convertirse en una tradición para la capital poblana. A principios de octubre, en las instalaciones del Centro de Bienestar Social de Xonaca, los organizadores abren las puertas a los poblanos para que se involucren en la elaboración de catrinas y calaveras.
Claudia explicó que este año en el taller construyeron cerca de 20 piezas, sin embargo, hay algunos participantes de años anteriores que guardan su pieza y la sacan para este desfile; por lo que cerca de 60 y 70 piezas participaron en este año.
“Esto surge para incentivar y que no se pierdan las tradiciones mexicanas al rededor de día de muertos, hace años el Halloween estaba opacando el Día de Muertos y con esto lo queremos fomentar”, comentó.
Durante el desfile, los niños y adultos se emocionaron con las piezas que reflejan la cultura mexicana. De hecho, algunas de las creaciones estuvieron decoradas con flores y hojas de maíz, haciendo de la noche un gran festejo de la vida y la muerte.
Puebla vive el festival La Muerte es un Sueño
Además, este 2 de noviembre, la ciudad de Puebla fue escenario del festival La Muerte es un Sueño, en el que participaron contingentes disfrazados de calaveras y catrines.
El recorrido comenzó cerca de las 18:00 horas en la avenida Juárez con sentido al Zócalo de la ciudad. En el desfile participaron azteca con rostro de muerte, catrines, y figuras emblemáticas del Mictlán.
Los poblanos apreciaron las bandas de música y los coloridos personajes que marcharon con júbilo para cerrar con broche de oro las actividades del 2 de noviembre.
IGO