Al darse a conocer la investigación en uno de sus ranchos por el presunto desvío de agua para el llenado de presas propias, el cantante Lalo Mora negó las acusaciones y abrió las puertas de su propiedad para aclarar la situación.
En exclusiva, el equipo de Telediario recorrió el rancho del artista, el cual comprende 600 hectáreas en el municipio de China, Nuevo León.
"Me preguntaba ayer una muchacha ‘don Lalo ¿Cómo es posible que se esté robando el agua? Y le digo, no mamita, que voy a estar haciendo eso, yo tengo agua, pero porque Diosito me la mandó, pero no me la robo", dijo.
Durante el recorrido se observaron pequeños embalses en donde se almacenaba el agua, la mayoría de ellos vacíos por la sequía, otros con agua de lluvia y unos más formados de manera natural.
"Y es más, allá en la 21 en Guadalupe , ahí vivo yo, me bañé con vaso… con botes, entonces no tengo porque hacer eso", mencionó.
"Que Lalo Mora el cantante y no sé qué más, pero yo no soy así, y no voy a hacer eso (robar agua), por eso tengo mis presas yo, está agua es de lluvia, está hasta oscura por la hoja del monte, acarreo de basura", agregó el cantante.
El cantante aclaró que su predio está lejos de la presa y del acueducto, de dónde la autoridad señaló que se desviaba el vital líquido.
"Pero que tomen en cuenta y que quede muy claro, que estoy a tres kilómetros de la presa El Cuchillo y yo de lo ductos, ni estoy a la orilla del acueducto que conducen el agua a mi Monterrey querido, y si estuviera no lo haría", mencionó.
Lalo Mora invitó al gobernador Samuel García a acudir a la propiedad y recorrerla, a fin de descartar cualquier anomalía.
"Yo conozco a Samuel (García) poquito, no tengo amistad con él, pero me gustaría que viniera a mi rancho, yo lo invito a que investigue mi presa y si quiere para él el venero que lo busque por debajo de la tierra porque yo no tengo ducto como te repito, y un abrazo para él", señaló.
Don Lalo refirió que incluso la sequía afectó más de 50 hectáreas en su rancho, además de que existen instalaciones de la CFE en su predio sin autorización y otros daños generados por la construcción de las carreteras aledañas.
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