En el Estado de México, una niña de dos años fue atacada por dos perros de la raza Pitbull cuando se encontraba caminando con su madre en las calles del municipio de Melchor Ocampo, situación que fue grabada por las cámaras de seguridad del Barrio de San Antonio de dicho municipio.
La mamá y la menor vivieron momentos críticos, ya un perro atacó de repente a la niña y las arrastró por el suelo, mientras otro pitbull se sumó al ataque, por lo que la madre de la menor, a base de golpes, intentó que los animales dejaran a su hija, pero no tuvo éxito.
“Los perros se le quedaron viendo a mi hija, se le aventaron, lo que hice fue agarrar a mi hija aventarle una bolsa, pero no la quiso soltar, se la llevo arrastrando hasta su casa”, contó la madre a TELEDIARIO.
Los hechos ocurrieron en la calle Francisco I. Madero, donde presuntamente la menor acompañaba a su mamá a vender churros.
Al oír los gritos de la mujer, trasuntes que caminaban por la zona se percataron de los hechos y logaron detener el ataque de los perros a base de golpes con una pala.
“Iba yo saliendo de la casa cuando escuché los gritos de la señora que no podía quitar el perro (…) cuando nos acercamos la arrastraron hasta adentro de su domicilio y con una pala que traíamos le pegamos. Esa fue la única manera de que la soltó.”, contó José Morales, testigo del ataque.
Una patrulla de la policía municipal llegó al lugar y trasladó a la menor herida al DIF local; sin embargo, no atendieron a la menor por no contar con los medicamentos necesarios para brindarle la atención, situación que se replicó en otros hospitales.
“Llegaron los policías, me llevaron al DIF de Melchor, ahí me dijeron que no tenía el medicamento suficiente”, contó la madre.
Finalmente, la menor recibió la atención en el Hospital General de México, donde los médicos suturaron la parte izquierda de su rostro.
La madre aseguró que los dueños de los animales la acompañaron en todo el proceso y por eso decidió no denunciar los hechos; sin embargo, los vecinos del lugar aseguraron que no es la primera vez que se da un ataque de este tipo y al no haber una denuncia formal, las mascotas siguen en la calle como si nada hubiera ocurrido.
Con información de Osvaldo Müller.
lvm