“Vivía para drogarme y me drogaba para seguir viviendo”, reposteros de Neza hacen roscas de reyes como rehabilitación

Ésta es la historia de Pablo, un repostero que perdió la vida hace más de 20 años por el uso de las drogas; hoy, ayuda a otros a rehabilitarse.

Ex adictos hacen repostería como rehabilitación contra las drogas / Twitter: @Telediario.
Nezahualcóyotl, Estado de México. /

El 6 de enero significa un día especial para muchos niños, pero para Pablo, repostero que perdió la vista hace 23 años por el uso de las drogas, también es un recordatorio de la segunda oportunidad que le dio la vida, ya que ahora se encarga de elaborar las tradicionales roscas de los Reyes Magos en el municipio de Nezahualcóyotl, Estado de México.

Pablo se dedica a la repostería desde hace 22 años, es decir, un año después de haber perdido la vida por el uso de las drogas, mismas que utilizaba desde los 12 años de edad.

"Ya desde los 12 años, pues empezó mi vida y la drogadicción, me salí de la casa y durante más de 10 años vivía para drogarme y me drogaba para seguir viviendo", dijo a TELEDIARIO Pablo Martínez.

Pablo recibe apoyo de nueve personas de Drogadictos Anónimos de Nezahualcóyotl, con quienes elabora más de mil roscas del Día de los Reyes Magos entre el 5 y 6 de enero.

En la preparación de las roscas participan personas que se encuentran rehabilitándose por el uso de las drogas. Los recursos que se recaudan se utilizan para el proceso de rehabilitación de los reporteros; específicamente, para el pago de manutención, de las terapías y de los requerimientos de quienes están luchando por una nueva vida.

“Las circunstancias me orillaron a llegar aquí a Drogadictos Anónimos nuevamente, donde a cambio de la droga me dieron una vida útil y feliz", comentó Pablo Martínez.

A sus 51 años de edad, Pablo trabaja en la Panadería del Centro y contribuye en la rehabilitación de personas que siguen abusando de las drogas.

En entrevista para TELEDIARIO, Pablo Martínez se mostró agradecido por disfrutar de esta segunda oportunidad en su vida, la cual le permite preparar rosca de Reyes Magos.

"Ilusionando a los compañeros, que no hay necesidad de volverse a drogar. Preparar una rosca de reyes los estimula bastante, de ahí parte la importancia que tiene la familia", explicó Pablo.

Finalmente, el repostero de 51 años comentó que para las roscas y los panes del día a día, Drogadictos Anónimos utiliza ingredientes de primera calidad.

KT

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