“Que nos apoyen porque ese estudio es para que los doctores decidan si me operan o no”.
Es el deseo de Gerry un niño de 11 años a quien el cáncer le cambió la vida por completo, de los campos de beisbol de liga pequeña en Santa Catarina pasó a los estudios y las quimioterapias hace 5 meses que le detectaron la enfermedad.
“Se cae en la casa de la cama, se pega en la cabeza... tiene cáncer que se llama dendríticas plasmacitoides”, dijo Aurora Vallejo, mamá de Gerry.
El tipo de cáncer diagnosticado a Gerry se observa en poca frecuencia y representa menos del 1 por ciento de todas las neoplasias malignas y su incidencia es principalmente en adultos mayores.
Para seguir con el tratamiento este pequeño de 11 años requiere de un estudio conocido como scan pet pediátrico cuyo costo asciende a los 32 mil 800 pesos.
"Ha sido difícil, nunca imaginé estar de este lado, pero ha dado la vuelta muy radical, mi familia está fuerte, la fe en dios nos ha llevado hasta aquí donde estamos, ese es un gran valor, esto sé que trae una misión”, expresó la madre del menor.
La familia se sometió a diferentes estudios para determinar un candidato a trasplante y si todo avanza conforme esperan los doctores será su hermano Jonathan quien le done médula ósea entre enero y febrero del próximo año.
La actitud y las ganas por regresar al diamante de beisbol mantienen a Gerry fuerte y con el firme deseo de pronto tocar la campana de la salud.
mvls