Alfredo es un operador del camión troncal mejor conocido como 'Oruga', y que durante su trabajo se dedicó a realizar un acto que pocos se atreven ya que al término de su turno, encontró un objeto de valor en uno de los asientos traseros para después regresárselo a su respectiva dueña.
Mientras se encontraba trabajando, vio que el asiento tenía un celular; al darse cuenta que alguien lo había olvidado, se dedicó a revisar el celular que para buscar el modo de regresarlo a su dueño, y para su fortuna no tenía contraseña, por lo que directamente de metió a los contactos del Whatsapp donde vio lo que parecía el chat de un familiar.
"Yo vi el mensaje del celular y me llamó la atención, por lo que mandé un mensaje de voz para decirle que tenía el celular y que dónde podría entregarlo, y quién me contestó fue la hija, así que les dije que me quedara de ver con ellos", relata.
Fue entonces que acordaron verse en la estación de Santa Rita, la misma donde olvidó el celular. Para él pudo haber sido fácil llevarse el celular sin decir nada, especialmente porque no tenía contraseña, sin embargo él no lo pensó así y contactó directamente a la propietaria.
De hecho, en los 9 años que lleva trabajando en el Sistema Integrado de Transporte (Sit) ya había ocurrido algo similar dos ocasiones anteriores, por lo que no tuvo problema nuevamente de hacerlo.
"Pues solo lo hice, si no tuviera contraseña lo dejaba en las oficinas", añadió.
La dueña quiso compensar su trabajo, pero él no aceptó ya que los favores no se cobran según expresó Alfredo.
Además invitó a sus compañeros para realizar obras de este estilo por el bien de todos.
SEMY