Padres de familia de la escuela Francisco de Urdiñola reportan varias inconsistencias en el plantel educativo, una de ellas y la más reciente es la proliferación de garrapatas, las cuales presuntamente ya han afectado a estudiantes de tercer grado.
La institución ubicada sobre la calle Diego Ramon entre Pérez Treviño y Múzquiz en la colonia Urdiñola, en Saltillo, presuntamente se ha convertido en un nido de garrapatas, esto después de que un can infestado con estos animales entrara al plantel y durmiera varios días en el lugar.
“Ya tenemos varios días que niños han visto garrapatas, de hecho las han agarrado, piensan que son otro tipo de animales, mi niño me comentó que un compañero agarró una, la aplastó y le salió sangre, ayer (martes) los alumnos de tercero no vinieron a clases porque supuestamente unos niños fueron mordidos por garrapatas”, comentó la madre de familia Karina Aguillón.
Tras este problema, la directora de la escuela señaló a los padres de familia que la solución era que entre ellos cooperaran para costear los gastos de una fumigación, ya que dijo que la Secretaría de Educación no le habría dado respuesta acerca del caso, por lo que tendrían que dar una aportación económica para que se realizara.
“La directora comentó que ella no podía hacer nada porque la Secretaría no quería apoyarlos para la fumigación de la escuela, cosa que no es cierto porque hablé a Secretaría y podemos ir ahí o al antirrábico, y ahí dijeron que nos podían donar un polvo para fumigar pero no es el chiste que nosotros estemos comprando para fumigar, hay un presupuesto de unas kermes que se han hecho, no sabemos a donde va destinado ese dinero, se ha juntado buen dinero”, agregó la madre de familia.
“Hay dinero de las cuotas de la asociación de padres de familia que hasta la fecha la directora no nos ha dado rendición de cuentas, pagamos cuota mensual para la limpieza y los salones están al revés”, recalcó la señora Karina.
Al intentar hablar con la directora del plantel decidió no utilizar su derecho de réplica, indicando que la institución era un recinto federal donde no se aceptaban grabaciones por parte de los comunicadores, por lo que las sospechas por los padres de una mala administración y mal manejo de dinero salen a relucir.
JVS