En cuestión de horas, la Presa la Boca recuperó la vida que durante meses parecía perder, y por consecuencia, volvió el colorido de unos de los principales atractivos del llamado Pueblo Mágico.
El panorama desértico que prevalecía hasta la mañana del miércoles 18 de junio, es ahora un panorama donde el agua predomina.
Automáticamente, las visitas a este icónico sitio del municipio de Santiago, se dispararon.
Visitantes de otras ciudades, se enteraron por noticias que la presa la boca estaba agonizando.
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Por lo mismo, no esperaban ver el embalse como se observa en la actualidad.
¿Cómo cuidar el agua?
Tener acceso al agua es un privilegio, pero desafortunadamente muchas veces no se le reconoce su verdadero valor hasta que, por algún motivo, se ausenta. El agua es esencial para nuestra vida diaria, y su escasez puede llevar a crisis significativas. Por ello, es fundamental adoptar prácticas responsables para su uso y conservación.
Es crucial cuidar el agua y evitar su desperdicio. Aquí algunos consejos para lograrlo:
- Lavar el vehículo con un balde y no con manguera: Al usar un balde, se controla mejor la cantidad de agua empleada, mientras que con una manguera se puede desperdiciar una gran cantidad sin darnos cuenta.
- Cerrar la llave mientras te cepillas los dientes o te afeitas: Durante estas actividades, mantener la llave cerrada puede ahorrar varios litros de agua cada día.
- Tomar duchas cortas: Reducir el tiempo que pasamos en la ducha es una manera eficaz de conservar agua. Considera usar un temporizador para controlar el tiempo.
- Reutilizar el agua: El agua que utilizamos para lavar frutas y verduras, por ejemplo, puede ser reutilizada para regar plantas. Así, aprovechamos mejor este recurso.
- Mantenimiento de tuberías: Asegurarse de que las tuberías de casa estén en buen estado y sin fugas es esencial. Las fugas, por pequeñas que sean, pueden representar un gran desperdicio de agua a lo largo del tiempo.
- Cargar completamente la lavadora: Aprovechar cada ciclo de lavado llenando completamente la lavadora optimiza el uso del agua y reduce el número de lavados necesarios.
Estos son solo algunos ejemplos de cómo podemos cuidar el agua en nuestra vida diaria. Es importante recordar que el agua potable es esencial para vivir y nos ayuda a mantenernos sanos. Adoptar estas prácticas no solo ayuda a preservar un recurso valioso, sino que también contribuye a la sostenibilidad del medio ambiente y asegura que futuras generaciones tengan acceso a este vital recurso. Actuar con conciencia y responsabilidad es clave para un futuro más seguro y saludable para todos.