Ángela nació en enero junto con su hermana gemela y en el tiempo que lleva de nacida ya le tocó enfrentar una cirugía de cráneo, que en el sector privado oscila en los 400 mil pesos. A ella le tuvieron que remover los pequeños huesos de su cabeza para facilitar que su cerebro pueda seguir creciendo y se expanda como en cualquier bebé en desarrollo y que a futuro tenga una infancia y desarrollo lo más normal posible, explicó el neurocirujano pediatra, Edwin Ponce.
"La remodelación craneal se hizo por un padecimiento de craneosinostosis, es un cierre prematuro de las separaciones entre los huesos que permiten que el cerebro se desarrolle de manera normal, si estas suturas se nace sin ellas o se cierran de manera prematura en los primeros meses de vida, el cerebro se va quedar comprimido dentro de una caja rígida y posteriormente ya no se va desarrollar", explicó Edwin Ponce, especialista en neurocirugía pediátrica.
Este tipo de casos ocurre en México en uno por cada 10 mil nacidos vivos, por lo que la necesidad de neurocirujanos pediatras es evidente sobre todo en el sector público, reconoció el director del Hospital Materno Infantil en Saltillo, Carlos Iván Oyervides.
"De ahí la complejidad del procedimiento quirúrgico hacer que quede bien para que a los pocos días vuelva a la normalidad, sin dañar el cerebro, usando un taladro eléctrico con una nena de 9 meses, que no se te pase la broca”, indicó el director del Hospital Materno Infantil en Saltillo.
"Queremos decir que estamos súper orgullosos que de manera institucional podemos resolver este problema sin tener que referirlo a otro hospital”, agregó.
"Para el tamaño del estado tiene mucha chamba (el doctor) tiene que atender todo el estado entonces", indicó.
Madre de menor está agradecida
La madre de Ángela, la señora Laura Elizabeth Olvera está agradecida y sabe que su hija tiene una mejor expectativa de tener una vida normal sin efectos en su desarrollo neuronal.
"No sabíamos mucho de la situación, la verdad no sabíamos la magnitud del problema que tenía mi niña hasta que llegamos con el doctor, llegamos prácticamente en blanco. Las consultas son caras y no encontramos la especialidad, nos mandaron al Muguerza, pero no había disposición en el momento que nosotros requeríamos atención", dijo la madre de Ángela.
Edwin Ponce es el primer neurocirujano pediatra certificado que llega a Coahuila; junto con él este año llegó otro a Monterrey, Nuevo León, donde ya hay uno más desde el 2018; hay otro más en Tamaulipas, indicó el especialista recién llegado.
Todos están certificados por el Consejo Mexicano de Certificación en Pediatría COMECEP, el cual desde el 2018 estableció que deben certificarse, entonces solo había 45 especialistas de este tipo, hoy el doctor Ponce es el neurocirujano pediatra numero 102 certificado a nivel nacional.
JVS