La Romería de la Virgen de Zapopan fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco durante la XIII sesión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, celebrada en Port Louis, República de Mauricio. Este reconocimiento consolidó a esta manifestación religiosa y cultural, que se celebra desde 1734, como uno de los elementos más importantes del patrimonio vivo de Jalisco.
El proceso de inscripción de la Romería como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad fue el resultado de un trabajo colectivo que involucró a diversas instituciones y actores. La Secretaría de Cultura de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), junto con la Secretaría de Relaciones Exteriores, presentaron la candidatura a solicitud del Gobierno Municipal de Zapopan, la comunidad portadora y las autoridades de la Secretaría de Cultura de Jalisco.
El comité de la Unesco destacó la importancia de la Romería como un ciclo ritual que refleja la profunda conexión entre la comunidad y su identidad cultural, reconociendo que esta manifestación ha sido capaz de mantener su vitalidad y relevancia a lo largo de los siglos.
¿Cómo fue que la Virgen de Zapopan ganó este título?
En la sesión del comité, Marisol Languren, integrante del grupo de danzantes Guerreros del Sol Azteca y parte de la representación mexicana en Mauricio, dio un mensaje que fue determinante para la aceptación de la inscripción en la lista de la Unesco.
El respaldo a esta iniciativa también fue ofrecido por la Arquidiócesis de Guadalajara, la Provincia Franciscana de los Santos Francisco y Santiago, los cuarteles de danzantes, la Guardia de Honor y los calabroteros, quienes cada año forman la valla de protección en la procesión. El director de Patrimonio Mundial del INAH, Francisco Javier López Morales, celebró la culminación del proceso de inscripción tras seis años de trabajo iniciado en 2013, cuando se conformó el expediente técnico de la candidatura con el apoyo de especialistas en historia, antropología, conservación patrimonial y otras áreas.
El reconocimiento de la Unesco no solo pone en valor la importancia histórica y cultural de la Romería de la Virgen de Zapopan, sino que también reafirma el compromiso de la comunidad y de las instituciones mexicanas por mantener vivas sus tradiciones. Con la participación anual de más de 2 millones de personas, esta manifestación es un ejemplo del poder de la cultura para unir a la gente y perpetuar el legado de las generaciones pasadas.
La inscripción en la lista de la Unesco representa una oportunidad para fortalecer la salvaguardia de esta tradición y garantizar que continúe siendo un elemento fundamental de la identidad cultural de Jalisco y de México en su conjunto.
AM