El cuidado por la naturaleza, la amistad y la disciplina son valores que tienen en común Nicolás y Sofía, dos menores que forman parte del movimiento Scout en Puebla, que está por cumplir 90 años en la ciudad.
La dedicación y el esfuerzo los ha llevado a obtener reconocimientos bajo la filosofía del escultismo, que es lo que rige a este movimiento a nivel mundial.
El escultismo, definido por el Diccionario de la Lengua Española es un “Movimiento de juventud que pretende una educación integral del individuo, generalmente por medio de actividades en grupo y en contacto con la naturaleza”.
Nicolás Medina un pequeño de corazón Scout que aprendió a enfrentar sus miedos
El interés de aprender cosas nuevas motivó a Nicolás Medina Miranda a integrarse hace dos años al grupo Scout 17 en Puebla, que tiene su punto de encuentro de la zona de Los Fuertes de Loreto y Guadalupe, en la capital del estado, donde cada sábado realiza con otros niños, actividades físicas y, al mismo tiempo, aprende sobre el cuidado del medio ambiente, así como del trabajo del equipo.
A propósito del Mes del Niño, Nicolás platicó a Multimedios Puebla sobre cómo los niños pueden aportar a la comunidad a través de diversas acciones y hacer grandes cosas.
“Hace dos años que entré al grupo y espero aprender mucho. Me han enseñado a tener empatía, enfrentar mis miedos y nunca rendirme”.
El desarrollo de habilidades y su gusto por descifrar acertijos lo ha llevado a obtener diferentes insignias, un reconocimiento que otorga el movimiento Scout a las habilidades que los menores demuestran en diferentes áreas como la naturaleza, la comunicación, deporte o alguna disciplina.
“Lo que más me gusta es que puedo hacer mis especialidades y proyectos para así ganar reconocimientos. Tengo uno en ecología; otra en expresión y comunicación, una insignia que es vida al aire libre, ciencia y tecnología”.
La destreza que Nicolás mostró durante una práctica al ayudar a una persona herida le permitió obtener la insignia de seguridad y rescate, la cual, porta con orgullo.
Movimiento Scout en Puebla cumple 90 años
Este año, el movimiento Scout en Puebla cumple 90 años, con más de 2 mil integrantes, entre niños, niñas, adolescentes y adultos en 34 grupos que se concentran tanto en la capital del estado, Cholula, Cuautlancingo, Tehuacán, Zacatlán y Tlaxcala.
Guillermo Luna, presidente de Provincia Puebla y Tlaxcala de la Asociación Scouts de México A.C., expuso que, cada vez son más los menores que se interesan por formar parte de este movimiento, ya que no solo se trata de integrarse a una práctica de juegos, sino de una filosofía que les permite obtener herramientas de vida, fomentar su creatividad, espiritualidad e inspirar a otros.
“Este 2023 obtuvimos el primer lugar en crecimiento como Provincia Puebla, es decir, que, de todos los estados de la República, aquí en Puebla fue el estado que mayor crecimiento tuvo, porque hay más niños y jóvenes scouts que se están integrando, en esto digamos hay muchos objetivos educativos, pero también de desarrollo, por medio del juego se fomentan habilidades”.
Sofía Domínguez consiguió la insignia mundial Mensajeros de la Paz
Sofía Domínguez, quien forma parte del Grupo 34, comentó que fue por sus papás cómo conoció el movimiento y se integró desde hace cinco años.
“Desde muy pequeña mis papás estuvieron en los scouts y me empezó a llamar la atención. Siempre me ha gustado porque es muy divertido y aprendes muchas cosas, haces muchos amigos, te desarrollas como persona”.
Comentó que uno de sus mayores logros ha sido alcanzar la insignia mundial Mensajeros de la Paz, que reconoce a quienes generan un cambio positivo en sus comunidades y, a través de sus acciones busca inspirar a que otros jóvenes se sumen a la práctica del escultismo.
“Puedo hacer cualquier cosa, tengo la mayoría de las insignias. Una por expresión y comunicación, otra por ecología, también en deporte, humanidades, seguridad y rescate. Tengo una insignia mundial que es un proyecto en el que tratas de ayudar a la mayor gente que puedas. Mi proyecto fue donar cabello y ayudar a la comunidad”.
ERV