Luego de que casi un centenar de alumnos de la escuela primaria Hilario Esparza de la colonia Santiago Ramírez fueran rescatados entre el agua al inundarse en cuestión de minutos el plantel educativo, la mañana de este miércoles fueron suspendidas las clases presenciales para garantizar la integridad de los pequeños.
La coordinadora de Servicios Educativos en La Laguna de Coahuila, Flor Estela Rentería dio a conocer que por disposición oficial a partir de hoy en esta institución se van a clases virtuales el resto de la semana donde los maestros y directivos se mantendrán en contacto directo con los alumnos y padres de familia para garantizar el cumplimiento de las actividades académicas.
Detalló que ya han sostenido acercamiento con Protección Civil y el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento para el desagüe del plantel, sin embargo se mantendrán atentos de la contingencia ante el pronóstico de precipitaciones pluviales para el resto de la semana.
El retorno de los alumnos a las aulas, será determinado una vez que baje el nivel del agua y se conozca a detalle las condiciones de la infraestructura educativa, pues deberá emprenderse también la limpieza de las instalaciones.
Habitantes de la Santiago Ramírez duermen entre las aguas por inundación
Habitantes de las calles Rincón de las Noas, del Macho y Román Cepeda de la colonia Santiago Ramírez al sur de la ciudad, prácticamente durmieron entre el agua pues se negaron a salir de sus domicilios a pesar de que el agua superó el medio metro de altura.
Ana Karen Nava, vecina de la calle Rincón del Macho señaló que pasaron muy mala noche con las viviendas inundadas, muebles y ropa mojada por lo que temen pérdida total, sin embargo se resistieron a ir a los albergues.
En la zona afectada el agua superaba los 50 centímetros y a pesar de que trataron de contener que el agua se introdujera a los hogares, al interior la problemática se agudizó con el brote en los sanitarios y patios.
Alrededor de las 70 elementos de la Guardia Nacional arribaron a la zona con el Plan GN-A en apoyo a las familias, llenaron y cargaron costales de arena para colocarlos en los hogares y con ello evitar que el agua se introdujera a las viviendas.
La estrategia fue desplegada en coordinación con las autoridades municipales para atender a las familias ya que la situación no es halagüeña ante el pronóstico de lluvias y tormentas eléctricas para los próximos días.
DR