Dana Sofía Domínguez Vargas es una de las estudiantes de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex) que, al ser una mujer trans reconocida por la ley, se ha animado a solicitar el cambio de identidad en sus documentos de la universidad.
Comentó que la institución cuenta con la modalidad de transición en los documentos desde el 2015, por lo que fue sencillo hacer dicha solicitud, sin embargo, en el caso de Dana fue distinto ya que primero tuvo que hacer el cambio ante la ley.
También indicó que para poder ser reconocida como mujer tuvo que ser residente de la Ciudad de México, ya que únicamente ahí es legal hacerlo.
“Antes hubo un cambio en la Ciudad de México en 2015, y ya en septiembre u octubre que fueron los 90 días del decreto que se hizo en abril, ya muchas personas pudieron hacerlo y como en la Ciudad de México sí se podía hacer por personas que no eran originarios del lugar, hubimos muchas que migramos a hacerlo ahí, vivimos un tiempo en la capital”, indicó.
Dana concluyó sus estudios en la facultad de Química de la UAEMex, y es maestra en ciencias ambientales por el Instituto Tecnológico de Toluca. Actualmente se encuentra haciendo una especialidad en género, violencia y políticas públicas en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.
Se involucra en el activismo
Con 33 años cumplidos, Dana tiene todos los documentos que avalan su identidad, una que comentó, percibió desde que era una niña y que pudo materializar cuando cumplió la mayoría de edad.
Cuenta que se involucró con el activismo tras haber pasado por distintos tipos de violencia.
“El activismo me fue llevando a conocer más temas de género, entender que toda la problemática que se tiene en México, sobre todo, la mayoría es por esta falta de perspectiva de género, es decir que todas las personas, por el simple hecho de tu expresión y corporalidad te tratan diferente, entonces esto me llevó a querer estudiar un poco más este proceso y pues ya fueron pasando las etapas”, afirmó.
Dana comenta que en todo momento recibió el apoyo de su familia durante su transición, y aunque en un principio hubo cierta resistencia, hoy le brindan todo su cariño y soporte.
“Sí fue un choque con mi familia, pero hasta la fecha todavía vivo con ella, me dan de comer o me apoyan cuando no tengo algunos recursos. Entonces, al final del día, creo que ha sido uno de los motores más importantes que me ha ayudado a seguir con el camino”.
Reconoció que como ciudadana, vivió violencia social e institucional en el tiempo en el que sus documentos no correspondían con su aspecto y su identidad autopercibida, pero ahora que ésta se encuentra en su título y en su credencial universitaria, afirma que existe un avance en el reconocimiento de las diferentes identidades.
“Es muy importante actuar con perspectiva de género, porque eso va ayudar a todas las personas, créanme que el género está en todo el mundo”.
Según información proporcionada por la UAEMex, desde el 2015 que comenzaron a recibir solicitudes de cambio de identidad, han sido recolectadas 19, de las cuales cuatro han resultado favorables.
DR