Autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y del Colegio de Bachilleres (Colbach) se reunieron este 13 de junio para evaluar acciones en contra de los porros.
En una reunión de trabajo realizada en la Rectoría de Ciudad Universitaria, decidieron crear una coordinación interinstitucional para enfrentar a los porros que afectan a las preparatorias, CCH, vocacionales y colegios de bachilleres, entre otras instituciones de educación media superior de la Ciudad de México y del Estado de México.
La reunión surgió a iniciativa del rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, y en ella se acordó, además, hacer un censo de grupos generadores de violencia, elaborar un mapeo de riesgos y una agenda de riesgos.
“El objetivo es conformar un grupo, partiendo de la iniciativa del señor rector de la UNAM, para buscar soluciones conjuntas a este flagelo”, expresó Raúl Arcenio Aguilar Tamayo, secretario de Prevención, Atención y Seguridad Universitaria de la UNAM al inicio de la reunión.
El grupo permitirá que las tres instituciones intercambien información y se aseguró que contará con la capacidad de decisión, discreción y confidencialidad necesarias para cumplir sus objetivos.
En la reunión participaron directivos de diversas instituciones, entre ellos Benjamín Barajas Sánchez, director general del CCH; María Dolores Valle Martínez, directora general de la Escuela Nacional Preparatoria; María Isabel Rojas Ruiz, directora de Educación Media del IPN; y Adán Escobedo Robles, director general del Colegio de Bachilleres, así como directores de planteles educativos del nivel medio superior.
¿Por qué UNAM, IPN y Bachilleres crean un grupo contra los porros?
Los porros, o grupos violentos como los llaman las autoridades educativas, son grupos de choque usados para desestabilizar causas políticas y disuadir movimientos en contra del sistema establecido.
Se presentan a generar violencia en marchas, boletos, asambleas y otros tipo de manifestaciones organizadas por activistas, los cuales consideran que estos grupos están organizados por las propias autoridades educativas.
En la última incursión violenta de porros a una institución educativa, se registró en el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Naucalpan, cinco semanas antes de la reunión entre autoridades educativas; ese día, el 8 de mayo de 2024, un estudiante de la FES Acatlán murió.
El joven, identificado como Óscar García, acudió al CCH Naucalpan a recoger a su hermano, ante las noticias de que había violencia a las afueras del plantel. Las autoridades determinaron que el joven, estudiante de Derecho, falleció por un paro cardíaco y no a causa de los porros.
Previamente, la última vez que se supo de una agresión importante por parte de porros a estudiantes fue el 3 de septiembre de 2018, cuando estudiantes del CCH Vallejo y el CCH Azcapotzalco se manifestaron en Rectoría exigiendo mejoras administrativas.
KAT